Las Merindades y Miranda viven las peores inundaciones en años

Los principales ríos del norte de la provincia sufren crecidas históricas

El Ebro, el Nela, el Trueba y el Cadagua han provocado inundaciones

El Ebro se ha desbordado en Miranda y toda la parte baja ha quedado anegada

Las Merindades y Miranda viven las peores inundaciones en años

La lluvia caída en las últimas jornadas y el deshielo de toda la nieve acumulada en las montañas de Las Merindades están provocando las mayores inundaciones que se recuerdan en la zona desde hace décadas. Los principales ríos, incluido el Nela, el Trueba, el Cadagua y, sobre todo el Ebro, han incrementado significativamente su caudal, protagonizando crecidas e inundaciones que han obligado a activar todas las alarmas.

El Ebro ha superado un caudal de 1.400 metros cúbicos por segundo a su paso por Miranda

Quizá, la situación más compleja se está viviendo en Miranda, la principal ciudad afectada por las crecidas. Allí, el Ebro ha superado ya los 6,94 metros de altura y los 1.413 metros cúbicos segundo, unos registros que no se alcanzaban desde hace bastantes años. La crecida, que según la Confederación Hidrográfica del Ebro se ha estabilizado y se espera que vaya a la baja en las próximas horas, ha anegado toda la parte baja de la ciudad, incluyendo zonas como La Arboleda, la calle de Bilbao, la zona de Entrevías más cercana al río, parte de la Ronda del Ferrocarril y el barrio de Anduva. Edificios como la antigua Comisaría, el centro de salud o la Casa de Cultura están totalmente rodeados por el agua, lo que ha obligado a la Policía y a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil a cerrar al tráfico numerosas vías y empezar a disponer diques con sacos.

Además, una decena de calles del casco urbano mirandés permanecen cortadas al tráfico y ya se han inundado numerosos garajes y bajos. El grado de alerta ha sido tal que, incluso, se puso en tela de juicio la celebración del partido previsto esta tarde entre el CD Mirandés y el Racing de Santander, ya que el agua había empezado a llegar a los límites del estadio. A pesar de ello, el encuentro se ha disputado, y eso que no ha parado de nevar durante todo el partido, lo que ha dificultado sobremanera el juego de ambos equipos.

En el sur de la ciudad, además, tanto el Bayas (que ha llegado hasta los 4,65 metros de altura, aunque ahora ha bajado a los 3,96, y un caudal de 195,63 metros cúbicos) como el Zadorra presentan caudales históricos y han causado problemas también en las zonas bajas. De hecho, en el poblado de Los Ángeles se han inundado las zonas más cercanas al Zadorra, al igual que en el polígono de Ircio, totalmente cubierto por una inmensa capa de agua. Por todo ello, el Ayuntamiento activó ayer el Plan de Emergencia ante las previsiones que se manejaban, que parece que se están cumpliendo al pie de la letra.

En Frías

Protección Civil ha tenido que desalojar a numerosos vecinos en Frías y Montejo de Cebas

Aguas arriba, el embalse del Sobrón lleva ya varias jornadas con las compuertas abiertas de par en par al estar ya al cien por cien de su capacidad. Aún así, la capacidad de embalse no ha evitado que el Ebro se haya desbordado en buena parte del Valle de Tobalina. En Frías, por ejemplo, las aguas ya han anegado todas las riberas, incluyendo los campos de fútbol, el camping y las urbanizaciones ubicadas a los pies de la ladera de la localidad. Allí, los más veteranos del lugar aseguran no recordar una inundación de esta magnitud en los últimos 30 años. 

De momento, además de las pérdidas materiales que ya se han registrado en multitud de viviendas, locales y garajes, Protección Civil ha tenido que desalojar a varios vecinos de la zona baja de Frías, incluidas las instalaciones del camping, que han quedado totalmente anegadas. Muy cerca de allí, también han tenido que ser desalojados varios vecinos en Monjeto de Cebas y Montejo de San Miguel. Algunos de ellos han salido de sus viviendas “prácticamente nadando”. El número de evacuados ha ascendido a 20, según el delegado territorial de la Junta, Baudilio Fernández Mardomingo, y, si nada se tuerce, la situación podría irse normalizando, no sólo en el Valle de Tobalina, sino también en todas las Merindades.

En todas Las Merindades

Un poco más al norte, los ríos Nela, Trueba y Cadagua también presentan una situación más que compleja. Localidades como Villarcayo, Medina, Espinosa o Villasana se han visto ya afectadas por unas crecidas históricas que han anegado los bajos de innumerables edificios e instalaciones, obligando al corte puntual de decenas de tramos de carretera.

Ahora mismo, la DGT informa del corte de las vías BU-504 y BU-520 (Frías), BU-562 (Villacomparada), la BU-530 (Trespaderne), la BU-555 (Villamor), BU-530 (Trespaderne), la CL-628 (Medina de Pomar, Villarcayo y Peñahorada), la BU-526 (Espinosa) y la BU-551 (Castrobarto, Villamor y Criales). Además, se debe extremar la precaución en la N-232 (Pancorbo), N-629 (Trespaderne y Cernégula) y CL-127 (Obécuri) por balsas de agua, así como en numerosas carreteras provinciales y comarcales, algunas de las cuales presentan balsas de agua de hasta metro y medio de altura que impiden totalmente la circulación de vehículos.

También se están registrando numerosos problemas de suministro eléctrico en toda la zona norte, donde las inundaciones han provocado cortes de luz que han afectado a decenas de viviendas en lugares como Villarcayo o Medina de Pomar, sobre todo en la noche de ayer. 

Situación 1 de Emergencia

La nieve ha hecho acto de presencia, controlando los caudales, pero creando más problemas en carreteras

La complicada situación que se está viviendo ahora mismo ha obligado a la Junta de Castilla y León a activar la Situación 1 de Emergencia del Plan de Protección ante Riesgo por Inundaciones (Inuncyl) en toda la zona norte de la provincia. El delegado territorial, Baudilio Fernández-Mardomingo, está en contacto con la Agencia de Protección Civil, así como el resto de administraciones, para coordinar todas las actuaciones que se están llevando a cabo.

Previsiones

Pero lo peor puede estar por venir. Y es que, las lluvias dejarán paso este fin de semana a la nieve en toda la provincia, lo que también ha obligado a activar la alerta por parte de la Delegación del Gobierno. Según las previsiones meteorológicas, la cota de nieve podría bajar de los 500 metros desde esta misma tarde y los copos han comenzado a caer ya en Burgos, Miranda y numerosos puntos de la zona norte. De hecho, en zonas como Valdivielso ya ha nevado en abundancia y es obligatorio el uso de cadenas en Las Machorras, el puerto de La Mazorra, la N-232 en Cubillos del Rojo y otros puntos de la red provincial de carreteras. 

Y en la capital, el Ayuntamiento tiene preparado el operativo, con el preventivo en marcha, ante la previsible llegada de la nieve, no sólo durante este fin de semana, sino durante el resto de la próxima semana, según han informado el alcalde, Javier Lacalle, y el concejal de Seguridad Ciudadana, Salvador de Foronda. Para esta noche se contará con cuatro máquinas (cuchilla y esparcidora de sal) que vigilarán la ciudad.