1-3. El Burgos entra en depresión

Los blanquinegros acumulan seis partidos sin ganar y el equipo da claras señales de ser un equipo roto

El Coruxo no necesitó mucho para llevarse una victoria para la que solo le hizo falta una buena primera parte

Adrián, Rafa Mella en dos ocasiones, una en propia puerta y Salinas fueron los goleadores de la tarde

1-3. El Burgos entra en depresión El Burgos ha comenzado a retomar el vuelo."JARCHA"

Situación crítica para el Burgos Club de Fútbol. La sonora pitada de los aficionados burgaleses hacia su equipo y, sobre todo, hacia su directiva, al final del partido de esta tarde, resume el momento de hartazgo que vive una parroquia cansada de ver el paupérrimo juego de los suyos. Y es que seis partidos consecutivos sin ganar son muchos partidos para un escudo llamado a buscar cotas mayores.

Ficha técnica

1 – Burgos: Toni; Sergio Esteban, Odei (Pérez min. 69), Aitor Granados, Quesada; Zarandona (Pepe Delgado min.66), Sergio Cortés, Rodri; Jonatan Valle (José Fran min. 66), Adrián y Ander Vitoria.

3 – Coruxo FC: Brais; Mella, Cristóbal, Santi Comesaña Acoidan; Pablo García, Pedro Vázquez, Salinas (antúnez min. 70); Ortiz (Richi min. 91), Adrián (Alberto García min. 57) y Cifuentes.

Goles: 0-1 Adrián (minuto 8), 0-2 Rafa Mella (minuto 34), 0-3 Salinas (minuto 65) y 1-3 Cifuentes en propia puerta (minuto 74).

Árbitro: Albert Catalá Ferrán del Colegio Catalán sacó tarjeta amarilla a Acoidán, Pablo y Ortíz por parte del Coruxo CF y a Adrián

Incidencias: Undécima jornada de liga en la Segunda División B disputado en el estadio municipal El Plantío ante unos 1.900 espectadores.

El partido fue un cúmulo de sinsabores que dejaron una pobre imagen del Burgos CF en El Plantío. El Coruxo trabajó bien y no concedió oportunidades a una plantilla a la que le falta convicción. La fórmula gallega para llevarse una cómoda victoria no fue otra que una buena presión en todas las líneas, un juego preciso en tres cuartos de campo y un gran disparo. Con estos ingredientes en contra, el Burgos cuajó el que pudo ser su peor partido en lo que va de temporada.

Apenas iniciado el partido, el Coruxo combinó bien desde el centro del campo, hasta conseguir llegar al área de Toni Lechuga, donde recibió Adrián, que batió al meta blanquinegro con un buen disparo ajustado al palo izquierdo. Corría el minuto 8 de partido y el Burgos se veía por detrás en el marcador a la primera de cambio.

No sería hasta el minuto 25 cuando el conjunto blanquinegro consiguió llevar el balón hasta la portería de Brais. Sergio Cortés se fue por banda derecha, desde la que colgó el balón para que Adrián rematase de cabeza en una acción a la que llegó incómodo por un posible empujón dentro del área que pudo haber sido señalado como penalti.

A partir de ese momento, las visitas a la meta del Coruxo se repitieron con mayor asiduidad, que no con mayor peligro. Pero a los pírricos acercamientos que estaba teniendo el conjunto de Ángel Viadero respondió el Coruxo con un zapatazo de Rafa Mella desde la frontal del área que volaba hasta la escuadra derecha de Toni (0-2). Imparable el lanzamiento que llegó procedente de un despeje de córner cuando el partido atravesaba el minuto 34. Sin nada más reseñable se alcanzó el descanso, quince minutos para que la plantilla local hiciese examen de conciencia y recuperase algo del fútbol que atesora.

En la segunda mitad, el Burgos trató de recuperarle la cara al partido y el Coruxo esperó a los locales, reduciendo su presión sobre las líneas blanquinegras. Era el guión deseado por Rafa Sáez, que contempló cómo su delantero Salinas recibía el balón en el área después de un contragolpe de los gallegos y no perdonaba ante Toni Lechuga (0-3). Nuevo mazazo para la parroquia burgalesa, que hacía minutos que había asumido la suerte de su equipo. Aún quedaban 25 minutos de partido, pero el equipo de Ángel Viadero estaba sumido en una depresión que le impedía creer en la remontada.

Sin apenas merecerlo, llegó un regalo en forma de gol en propia puerta que se marcó Cifuentes cuando trató de despejar un centro de José Fran. Corría el minuto 74 y un halo de optimismo llegado desde la grada del fondo sur mantuvo expectante al resto del público de El Plantío. El Coruxo continuó su trabajo en defensa, ofreciendo todo el protagonismo del partido a los burgaleses, que lo intentaban sin éxito y con escaso peligro sobre la portería de Brais. Con más pena que gloria se llegó al final de un partido que debe servir para hacer un profunda reflexión antes de que sea demasiado tarde.

Superada la undécima jornada de liga, el Burgos CF viajará la próxima jornada a Santander para medirse al Racing en El Sardinero el domingo a las 17.00 horas.