Diputación equiparará los derechos de los trabajadores eventuales a partir de 2018
La Comisión de Régimen Interior decidió ayer aplicar medidas correctoras para intentar equiparar los derechos laborales de los eventuales a los del resto de la plantilla
La situación afecta a ocho empleados cuya figura jurídica es compleja
La Comisión de Régimen Interior de la Diputación de Burgos dio ayer luz verde a una modificación de las condiciones de trabajo de los empleados eventuales para equiparar sus derechos, al menos en parte, con los del resto de trabajadores de la institución. Tal y como explica el portavoz del Equipo de Gobierno de la Diputación Borja Suárez, la idea surgió de los propios trabajadores eventuales y fue recogida por Ciudadanos, que acabó elevándola a la Comisión.
Diputación cuenta ahora mismo con ocho trabajadores de esta categoría contratados por los grupos
En líneas generales, la propuesta aprobada ayer, que será incluida en el orden del día del Pleno de febrero, se basa en un ajuste temporal en 2017 para, a partir ya de 2018, establecer las condiciones que permitan a los trabajadores eventuales gozar a todos los efectos de varios de los derechos que sí tienen reconocidos el resto de empleados de la Institución Provincial. Se trata, en suma, de atajar una situación compleja y hasta cierto punto anacrónica que en otras administraciones ya está superada desde hace años.
Y es que, la figura del trabajador eventual (ocho en la Diputación) mantiene ciertas peculiaridades que les convierten en una rara avis dentro de la propia administración, al no haber entrado en la misma a través del correspondiente concurso u oposición, sino por selección discrecional. Básicamente, cuando se inicia la legislatura, cada grupo político tiene derecho a la contratación de trabajadores eventuales que les ayuden en el día a día (preparación de plenos, comisiones, propuestas, etc) en función al número de diputados de cada grupo. Estos empleados, que no están computados de manera efectiva en la relación de Puestos de Trabajo (RPT) mantienen unas condiciones diferentes al del resto de empleados, pero reciben sus emolumentos del mismo bolsillo.
Asumiendo la complejidad de la figura, pero entendiendo que este tipo de trabajadores también realizan funciones propias de la administración, la Diputación ha decidido poner fin a la problemática. Así, el acuerdo alcanzado con sindicatos y grupos políticos pasa por establecer un “complemento de disponibilidad” que permita a los eventuales conseguir algunos derechos ya reconocidos, como los trienios o los beneficios sociales y “equiparar” de esta forma derechos como el complemento de productividad, de difícil aplicación
Sin embargo, buena parte de esos derechos no podrán ser efectivos hasta el año 2018, puesto que el complemento de disponibilidad sobre el que se sustentan no cuenta con partida específica en Plantilla Presupuestaria y existen varios condicionantes jurídicos. Vamos, que en 2017 habrá un parche a la espera de la solución definitiva.
