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La plataforma ciudadana Comunales Vivos ha puesto el cronómetro en marcha, porque «Burgos no se vende». Miembros de la organización se han manifestado esta mañana, frente a la Subdelegación de Gobierno, durante la presentación de una campaña de movilización ciudadana que para dar a conocer las cerca de 200 alegaciones que los propios burgaleses han realizado contra la venta de los terrenos del Parque de Artillería. El objetivo, conseguir que se suspenda cautelarmente la enajenación de los terrenos, ha explicado Néstor Cerezo, miembro de la plataforma.
No en vano, esta vía jurídico-administrativa es sólo uno de los dos pilares que Comunales Vivos quiere utilizar para conseguir que esos terrenos acaben teniendo un uso público. La otra es la movilización ciudadana. De ahí que, con la presentación de las cerca de 200 alegaciones ante el Ministerio de Defensa, se dé el pistoletazo de salida a un programa de diferentes actos públicos. A través de este movimiento, Comunales Vivos quiere demostrar el «músculo social» con el que cuenta la ciudad para impedir que el Parque de Artillería acabe siendo utilizado para la «especulación inmobiliaria», aseguran desde la plataforma.
Por ello, el día 19 de enero, y con la suficiente publicidad, Comunales Vivos ha convocado una gran manifestación a la que esperan que asistan burgaleses de todos los barrios, porque ese suelo debe de volver a ser público y para un disfrute de todos los burgaleses, defienden. Aún no hay hora y recorrido definido para el que pretende ser el gran acto de protesta de esta campaña.
No obstante, Comunales Vivos también ha remitido dos cartas a alcalde, Javier Lacalle, y al subdelegado de Defensa en Burgos, Javier Martínez de Lagos, solicitándoles que participen en un debate público «con luz y taquígrafos», para tratar de explicar por qué esos terrenos que fueron cedidos por el Monasterio de San Juan de Ortega, para un uso comunal, pueden acabar en manos privadas. Además, aseguran desde la plataforma que «la compra de los terrenos donde se ubica el Parque de Artillería fue fraudulenta». Estas dos conclusiones, se extraen del trabajo realizado por el historiador Pedro Ojeda. A raíz de ese documento se gestó la asamblea que ha dado forma a Comunales Vivos. Será esta plataforma, en la que se exige que no se pongan de relieve siglas políticas, a través de la cual se tratará de conseguir el respaldo vecinal suficiente para paralizar la venta de los terrenos.
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