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Entre nuboso y cubierto. Así estará el cielo en la provincia burgalesa durante el Viernes Santo, si bien es cierto que remiten las lluvias y por la tarde podremos ver el sol. La alerta por fuertes lluvias y tormentas ha quedado desactivada, después de que el agua haya marcado las últimas jornadas de Miércoles y Jueves Santo.
Se han deslucido procesiones, como la de El Encuentro en Burgos, que salió a medias, o la Pasión Viviente de Lerma, que se tuvo que suspender. Y las incorporaciones a la Semana Santa de Burgos, la Procesión Virgen del Amor Hermoso y Ministerio de la Coronación de Espinas y Exaltación de la Santa Cruz se han visto deslucidas pese a la novedad.
Sin embargo, parece que el tiempo va a empezar a dar una tregua este Viernes Santo. Seguirán las nubes y todavía se mantienen los pronósticos de lluvia, pero mucho más débil y sin incidencia por la tarde, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología.
En Burgos capital hay previsión de lluvia hasta mediodía, sin embargo, lucirá el sol ya por la tarde, así que se espera que El Desenclavo (13:00), el Traslado del Cristo Yacente (20:00) y la Procesión del Santo Entierro (20:30) se puedan celebrar con normalidad.
También se confía en que las lluvias respeten la Semana Santa en la provincia, con citas tan señaladas como la Pasión Viviente de Covarrubias, la Pasión de Cristo de Araúzo de Miel o las pasiones vivientes de Villalbilla de Burgos y La Molina de Ubierna.
Ya para el sábado se abren claros y suben las temperaturas, que podrían alcanzar los 23 grados en algunos puntos de la provincia. Este Viernes Santo, pese a las nubes, las máximas oscilarán entre los 16 grados y los 22 grados.
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