Siete razas autóctonas y más de 36.000 animales, Burgos protege su patrimonio ganadero
Burgos reúne más de 36.000 ejemplares de razas autóctonas como el losino o la churra. Un esfuerzo conjunto de ganaderos, asociaciones y administración para mantener viva la esencia rural de la provincia
La provincia de Burgos, con su orografía cambiante y variada, alberga unos 36.616 ejemplares de animales pertenecientes a siete razas consideras autóctonas según el Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España.
Estas razas autóctonas que encontramos en Burgos son la monchina, tudanca y serrana negra en cuanto a ganado bovino. En ovino encontramos ovejas churras y castellanas. Burgos también alberga dos razas autóctonas de equinos: el hispano bretón y el característico losino. Raza oriunda del valle burgalés de Losa y en serio peligro de extinción, según se apunta desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural.
A todas estas hay que sumar tres razas caninas autóctonas que habitan en Burgos: el perro de pastor leonés, el mastín español y el perdiguero de Burgos.
Las ayudas para mantener e impulsar la reproducción
Castilla y León tiene una geografía variada y dispone de numerosas y diferentes recursos naturales para el aprovechamiento directo de las razas ganaderas. Desde rastrojeras y dehesas a los pastos de alta montaña, los ecosistemas son aprovechados por razas ganaderas autóctonas y otras foráneas.
Recientemente, la Junta ha sacado una línea de ayudas de 250.000 euros para las asociaciones encargadas de gestionar estos libros genealógicos. El objetivo es promover el mantenimiento de estas razas autóctonas.
Esta línea complementa a la convocatoria de ayudas dirigida a los criadores. En 2025 esta línea está presupuestadas en dos millones por parte de la Junta. Las cuantías oscilan entre los 18 euros por ejemplar en el caso de razas aviares y 360 euros por unidad de ganado mayor hasta un máximo de 6.000 euros.
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Estas ayudas tienen por objetivo sufragar la actividad de las entidades encargadas de preservar el patrimonio genético de las razas autóctonas de Castilla y León. Actualmente, en la comunidad están reconocidas nueve asociaciones de criadores de razas autóctonas que agrupan más de 1.000 explotaciones y 35.200 ejemplares selectos.
BOVINAS
MONCHINA
El significado de monchina es el que vive en el monte, aludiendo a la condición semibrava y a los terrenos donde se explota esta raza. Actualmente, su aprovechamiento es exclusivamente cárnico.
La raza monchina radica en el suroeste de Vizcaya, sureste de Cantabria y en el norte de Burgos, especialmente en las Merindades. Se contabilizan unos 281 ejemplares en siete ganaderías.
Es una raza rústica, adaptada a zonas montañosas y duras con un pelaje oscuro y con una excelente capacidad para aprovechar pastos pobres.
TUDANCA
El nombre hace referencia a su lugar de origen y expansión, el valle montañés de Tudanca, en los montes cantábricos. Se localiza en el sur y suroeste de Cantabria, pero con presencia histórica en Burgos. Su aprovechamiento también es exclusivamente cárnico.
Burgos cuenta con un total de 241 animales.
SERRANA NEGRA
Debe su nombre a sus áreas de asentamiento, las serranías, y al color de su capa, negro. Su origen está en las sierras del norte de Soria y zonas limítrofes con Burgos y Logroño.
Su aptitud principal es la producción de carne y trabajo en el monte para la manipulación de madera de pino. Tuvo gran importancia en Burgos en el aprovechamiento forestal por su notable adaptación a este medio. Se explota en extensivo y en Burgos se contabilizan 43 ejemplares.
OVINAS
CHURRA
Esta raza tiene amplia presencia en Burgos. Es una oveja rústica de las más primitivas de la península. Es una de las razas autóctonas más importantes de España, por su especalización en la producción de leche y por la calidad de su lechazo.
Se extiende principalmente por las provincias de Burgos, León, Palencia, Valladolid y Zamora. En Burgos se contabilizan unos 31.141 ejemplares.
CASTELLANA
Se explotó y formó durante siglos en Castilla la Vieja, de ahí su nombre. En Burgos se contabilizan unos 2.403 ejemplares.
EQUINAS
HISPANO-BRETÓN
Deriva del cruce de yeguas españolas con sementales de la raza francesa bretona, principalmente, para aumentar su corpulencia. De aspecto robusto, pero carácter tranquilo y enérgico.
Es una raza amenazada y se distribuye por zonas montañosas de Castilla y León, Cantabria, La Rioja y el Pirineo aragonés. Es una de las razas emblemáticas de Burgos. Raza de carne muy apreciada y resistente al clima frío. Se contabilizan unos 1.544 ejemplares.
LOSINO
Es una raza oriunda del valle burgalés de Losa, de ahí su nombre. Se encuentra en el norte de la provincia de Burgos y zonas montañosas cercanas.
Es una raza en serio peligro de extinción, se cuentan 963 reproductoras todas ellas en Burgos, concretamente en Merindades y en Pancorbo.
Es de tamaño pequeño y color azabache. Manso, inteligente y sociable, aunque con un temperamento vivaz y de gran instinto gregario, vive en semilibertad. Se mantiene bajo un programa de conservación genética controlada.
Los peligros a los que se enfrentan
Todas estas razas autóctonas deben ser conservadas como patrimonio genético local para favorecer su expansión y evitar su abandono y extinción, al disponer en su mayoría de escasos censos poblacionales y estar sometidas a factores de riesgo, con diversos grados de amenaza. La evolución del censo, en los últimos años, se mantiene en el tiempo sin grandes variaciones, especialmente en las razas amenazadas. A pesar de la creciente demanda de productos locales y de ofrecer muchas de estas razas productos de calidad, la dificultad de encontrar vías de comercialización y la competencia con otras razas más productivas, hace que las perspectivas para las razas con un grado de amenaza alto sean preocupantes como es el caso del caballo losino y la vaca serrana negra, dos ejemplos burgaleses.