Y un ángel bajó de los cielos para liberar a María del luto santo
Leire Arrabal García ha cumplido con la tradición y, sobrevolando a la Virgen, le ha retirado el velo negro
La Bajada del Ángel de Aranda de Duero anuncia la resurrección de Cristo en la mañana del Domingo de Pascua
El ángel ha retirado el velo negro a la Virgen en el Domingo de Resurrección. Lidia Sierra
La pequeña Leire Arrabal García, de seis años, ha cumplido esta mañana con una de las tradiciones que más emocionan a los ribereños. Como un ángel bajado directamente de los cielos, Leire ha retirado el velo negro a la Virgen de las Candelas, anunciando la resurrección de Cristo y poniendo punto final a una dura semana de pasión cristiana. El sol y las buenas temperaturas han acompañado esta escenificación religiosa, presenciada por numeroso público que, una vez más, ha abarrotado la Plaza de Santa María de Aranda de Duero.
La Bajada del Ángel, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional, se ha iniciado pasadas las once y media de la mañana con la salida de las imágenes de la Virgen de las Candelas, con velo negro cubriéndole la cara, y de Cristo Resucitado de la Iglesia de Santa María. Los pasos, ambos del siglo XVII, se han encontrado frente a la portada principal del templo arandino y, tras las correspondientes salutaciones, la Virgen se ha colocado en el centro de la plaza, bajo el sistema de cuerdas y poleas que sostiene al angelillo.

La Bajada del Ángel ha congregado a numeroso público en Aranda. Lidia Sierra
Como manda la tradición, el globo azul y blanco se ha abierto dejando “caer” a la pequeña Leire, que con mucha seguridad y desparpajo ha soltado las palomas y, agitando pies y manos, le ha retirado el luto a la Virgen. A continuación, se ha quitado la corona de flores, en muestra de respeto por la Madre que se encuentra con el Hijo resucitado. La alegría cristiana de la Resurrección se ha mezclado con la emoción de los arandinos en esta escenificación religiosa, de origen desconocido pero que recuerda a los autos sacramentales del Siglo de Oro.
Seguidamente, se ha iniciado la procesión por las calles del centro histórico de Aranda, encabezada por las imágenes de Cristo Resucitado y la Virgen de las Candelas. El angelillo ha procesionado bajo las andas de la Virgen, portando el velo negro recién retirado, recibiendo felicitaciones de cuantos se encontraba a su paso, en una procesión festiva, alegre, propia de un Domingo de Pascual. El recorrido ha finalizado en la Iglesia de Santa María para la tradicional Misa de Pascua, presidida por las autoridades ribereñas.
