5-1. El Burgos se jugará la permanencia en el play out
El Burgos CF cae dolorosamente goleado frente al Boiro y se ve abocado a jugar el play out de descenso al ganar el Caudal su particular choque ante el Pontevedra
Los hombres de Nacho Fernández firmaron uno de los peores partidos de la temporada cuando más exigencias tenían sobre la mesa
El Burgos deberá medirse al Levante B, el San Sebastián de los Reyes o el Linares
Podía pasar. Y Pasó. El Burgos deberá jugarse la permanencia en un agónico play out tras ser dolorosamente goleado por un Boiro que también se jugaba la vida. Ni siquiera la opción del Caudal surtió efecto. El cuadro asturiano ganó al Pontevedra en su duelo particular y se salvó de la quema. No así el conjunto burgalés, que cuando más necesitaba un golpe sobre la mesa firmó uno de los peores partidos de la campaña -que ya es decir- hincando la rodilla ante un Boiro que le acabó endosando 5 goles.
Ficha Técnica
5 – Boiro: Pato; Axel, Jimmy, Crespo, Catú, Vebra, Marcos, Gonzalo, Rivera (Outeiral, min.83), Romay (Pablo, min.87) y Cano (Beda, min.75)
1 – Burgos CF: Toni; Andrés, Jorge García, Odei (Ramiro, min.75), Jorge Fernández; Cusi, Prosi, Chevi; Armiche (Popa, min.80), Antón (Suárez, min.59) y Adrián
Goles: 1-0, min.46: Rivera; 2-0, min.55: Jorge García (pp); 2-1, min.63: Chevi; 3-1, min.73: Rivera; 4-1, min.75: Cano; 5-1, min.91: Beda.
Árbitro: González González (Canarias). Mostró tarjeta amarilla a Catú por el Boiro y a Jorge García y Ramiro por el Burgos.
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo octava jornada del Grupo I de la Segunda División B disputado en el estadio municipal de Barraña ante 1.600 espectadores. Alrededor de 200 aficionados se desplazaron desde Burgos. La segunda parte comenzó con varios minutos de retraso por un problema en las redes de una de las porterías.
Mucho orden y respeto mutuo en los primeros compases. Ambos equipos se jugaban toda la temporada en 90 minutos, y esa circunstancia sobrevoló el municipal de Barraña desde el principio. Eso sí, el Boiro debía arriesgar más que el Burgos, dado que afrontaba la última jornada ocupando la plaza de play out. En ese escenario, y siempre con un ojo puesto en el choque entre el Pontevedra y el Caudal, el tercer equipo en disputa de esa plaza, fue el conjunto gallego el encargado de asumir la iniciativa, apostando por un juego combinativo y mucha presencia por la banda izquierda.
Sin embargo, el orden defensivo del Burgos, que saltó al terreno de juego con un juego más directo, consiguió anular todas las internadas del Boiro. En el minuto 9, Jimmy ganaba con calidad línea de fondo y probaba con un pase atrás que no encontraba rematador, y un minuto después, el conjunto gallego desaprovechaba un libre indirecto al borde del área.
La lluvia había hecho acto de presencia y el campo estaba pesado, impidiendo una buena circulación del balón y provocando un juego intermitente, sin continuidad por parte de ninguno de los dos contendientes. Eso sí, a medida que pasaban los minutos, el Burgos fue ganando presencia en el terreno de juego. Cusi y Chevi consiguieron hacerse con el control del centro del campo, pero a los hombres de Nacho Fernández les faltaba profundidad. Si acaso, alguna internada infructuosa de Armiche y Adrián.
El partido avanzaba casi sin pena ni gloria hasta que en el 29 llegaron noticias de Mieres. El Caudal acababa de marcar y obligaba al Boiro a estirar líneas para buscar el gol. Y a punto estuvo de lograrlo apenas dos minutos después, cuando Romay aprovechó la falta de contundencia de la defensa blanquinegra en el despeje de una jugada a balón parado y probó a Toni con un potente disparo a bocajarro. Un disparo al que el cancerbero respondió con calidad, sacando una mano salvadora.
El Boiro había ganado en profundidad y volvió a adueñarse de la iniciativa, momento en el que llegaron buenas noticias de Mieres para ambos equipos. El Pontevedra acababa de empatar, lo que volvía a colocar al Caudal en la posición de play out. Fue entonces cuando el Burgos dispuso de su única ocasión real en la primera parte, con un disparo lejano de Armiche que se marchó desviado.
Y cuando parecía que ambos firmaban marcharse al descanso con el empate, llegó el golpe. Al filo del descanso, Rivera volvía aprovechar la falta de contundencia de la zaga burgalesa en un despeje, controlaba la pelota dentro del área y batía a Toni con calidad. Mazazo en toda regla para un Burgos al que le tocaba serenarse y buscar el empate sí o sí para evitar nervios de última hora.
Crónica de una muerte anunciada
Sin embargo, el escenario siguió complicándose por momentos tras el paso por vestuarios. Primero llegó el segundo gol del Caudal en Mieres, que ponía al Burgos en el puesto de play out. Al conjunto blanquinegro solo le valía en ese momento marcar el empate por la vía rápida, pero lejos de conseguirlo, comenzó a cavar su propia tumba. En el 55, Jorge García desviaba un centro de Romay y sorprendía a Toni, que no podía hacer nada para evitar el gol en propia meta.
A partir de ahí, el Boiro desplegó todo su juego, y a pesar de que Chevi recortaba diferencias en el 63 con un cabezazo inapelable desde la frontal del área pequeña, el conjunto gallego no tardó mucho en sentenciar el choque. Cano, que ya había protagonizado un par de avisos, mandaba un cabezazo al palo en el 67 y, apenas seis minutos después, un error clamoroso de Toni a la salida de un saque de esquina dejaba el tercero en bandeja a Rivera.
El 3-1 cayó como una losa sobre el conjunto blanquinegro, que dos minutos después veía cómo Cano marcaba el cuarto tras aprovechar un contragolpe y ganarle la partida a Jorge Fernández y Toni para introducir la pelota en las redes a placer.
A partir de ese momento, la única oportunidad del Burgos para salvar lo muebles pasaba por un empate en Mieres, pero el Pontevedra no se jugaba nada y la opción se antojaba complicada, toda vez que remontar tres goles ante un Boiro muy superior fue misión imposible. De hecho, aún hubo tiempo para que el conjunto gallego marcara el quinto en el descuento con un disparo a placer de Beda desde dentro del área.
Total, que el Burgos deberá jugar el play out, un desenlace que seguramente se merece tras la desastrosa temporada desarrollada por el equipo. Ahora, solo queda esperar rival y confiar en que, esta vez sí, el cuadro burgalés salve los muebles, que es lo máximo que puede conseguir. El San Sebastián de los Reyes, el Levante B y el Linares son los posibles rivales.
