Hostelería sospecha de la falta de infraestructuras ante la caída de actividad turística…
El sector registró en junio y julio un descenso del 3% en las pernoctaciones y el primer lleno del año no ha llegado hasta el 5 de agosto
Luis Mata afirma que Burgos está perdiendo peso frente a ciudades como Valladolid y León y lo achaca a los retrasos en infraestructuras clave
La ausencia de promoción adecuada y el extremo calor, que ha ahuyentado a turistas y peregrinos, también se consideran en la federación hostelera
Vista de la Catedral. JAQ
El verano está siendo un tanto irregular para la hostelería burgalesa, principalmente en lo referido a reservas hoteleras. Durante los meses de junio y julio, los últimos con datos oficiales, se registró una caída del 3 por ciento en pernoctaciones en la capital burgalesa, acompañada por otro tres por ciento de reducción en los precios. El descenso no tendría que ser “alarmante”, a juicio del presidente de la Federación Provincial de Empresarios de Hostelería, Luis Mata, si no viniera acompañado por otros indicativos de que “algo se está haciendo mal”.
Para empezar, Mata ha recordado que esa disminución solo se ha registrado en Burgos. “Es sorprendente” que en el resto de ciudades españolas la tendencia sea la contraria, en especial en algunas de Castilla y León como Valladolid o León, lo que “no es un buen augurio”. Una vez más, el presidente de los hosteleros clama contra la ausencia de promoción, si bien reconoce que el calor excesivo sufrido este verano ha ayudado a que muchos turistas hayan preferido la playa al turismo de interior cultural, o a que se reduzca el número de peregrinos.
Mata reconoce que es “sorprendente” que Burgos registre caídas frente a los incrementos nacionales
Sin embargo, la principal preocupación de los hosteleros se centra en las infraestructuras. Los últimos datos conocidos hablan de un descenso en la siniestralidad en las carreteras de la provincia, y Mata sospecha más que en una mejora de las infraestructuras en una reducción del tráfico. León y Valladolid están registrando más circulación, en detrimento de Burgos, cuando somos provincia (y ciudad) de paso y, ante una supuesta reactivación económica, debería registrarse también un incremento en el número de viajeros.
Futuro económico
“Nos jugamos la economía de la ciudad”, ha recordado el presidente al hablar del futuro de las infraestructuras, desde autovías pendientes al AVE, que no acaba de llegar. Mientras otras provincias ya han sumado seis y siete días con el cartel de lleno, a lo largo de todo el año, en Burgos el primer lleno absoluto se registró el pasado 5 de agosto y el segundo, este sábado 12. “Se está llenando, pero los síntomas indican que algo no funciona”; la hostelería burgalesa es la última en completarse, y a base de ofertas, “exceptuando momentos puntuales”.
Y agosto no está variando precisamente la tendencia de junio y julio. Es el mes más fuerte del año, ha reconocido Luis Mata, y casi seguro que se cierre con descensos en pernoctaciones con respecto a 2016. Este puente de 15 de agosto ha sido lo más destacado, pues coincide con cambio de quincena y muchos viajeros pasan por Burgos. El sábado ha sido el día con mayor número de reservas, con ese completo, y el viernes tampoco ha estado mal. Un poco más flojos han sido domingo y lunes, ha asegurado el presidente de los hosteleros.
