Exigen a la Junta un cambio “radical” de la política forestal y que deje de “encomendarse” a la lluvia

UGT y CC.OO. convoca una concentración en el Servicio Territorial de Medio Ambiente para denunciar las deficiencias del servicio de prevención y extinción de incendios forestales

Afirman que la Junta solo se preocupa por los fuegos en periodo estival, confiando en que no haya problemas y encomendándose a la lluvia

Las reivindicaciones se centran en aumentar la contratación para labores de prevención, crear la figura del bombero forestal y desarrollar una brigada de investigación

Exigen a la Junta un cambio “radical” de la política forestal y que deje de “encomendarse” a la lluvia La concentración ha tenido lugar esta mañana. PCR

Solo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena, y además el efecto nos dura poco. Así lo ven en el sector forestal. UGT y CO.OO. se han concentrado esta mañana en el Servicio Territorial de Medio Ambiente, dentro de una campaña de concentraciones que se han repetido en todas las provincias de Castilla y León salvo Valladolid, para exigir a la Junta un cambio “radical” de la política forestal y que ponga los medios materiales y humanos para luchar eficazmente contra los incendios, dejando de “encomendarse” a la lluvia.

Julio César Martín, responsable de UGT, ha asegurado que los últimos incendios de Galicia solo han servido para que los políticos “se asusten”, pero pasado el mal trago no se acometerá ninguna actuación para mejorar los operativos de prevención y extinción de incendios. La experiencia se lo dice y en Castilla y León la preocupación por los fuegos forestales surge el 1 de julio, cuando se inicia el operativo, y dura hasta el 30 de septiembre, cuando se le pone fin. Y, mientras, se encomiendan a la lluvia, ha apuntado Ángel Citores, secretario de CC.OO. Burgos.

La Junta redujo al 50% el operativo en octubre y los incendios se han “descontrolado”

La política forestal requiere de un cambio “radical”, en el que se modifiquen sus prioridades para anteponer las necesidades del medio rural y de los trabajadores forestales a los intereses económicos. Se falla en prevención, que es lo que evita los grandes incendios. Y los recursos humanos y materiales son insuficientes. Además, la política forestal no se ha adaptado a las nuevas realidades y, como ha ocurrido este año, la Junta ha reducido al 50 por ciento el operativo en octubre a pesar de que existía un alto riesgo, por las elevadas temperaturas y la fuerte sequía.

Por ese motivo, los incendios ocurridos en Castilla y León durante el último mes se han “descontrolado”. El operativo “ha colapsado”, a pesar del esfuerzo de los trabajadores forestales. La comunidad ha batido este año su récord histórico con 2.500 incendios forestales y más de 11.000 hectáreas calcinadas. En Burgos no se ha dado ningún incendio grave, pero ha sido por suerte, pues a la Junta “le gusta jugar con el riesgo”, ha apuntado Martín, tras recordar que comenzaron el operativo estival con el 70 por ciento de las torres de vigilancia sin cubrir.

La concentración de esta mañana ha servido para exigir, una vez más, que se amplíen las contrataciones de los trabajadores forestales a un mínimo de seis meses, llegando a cubrir un año de trabajo, para garantizar un operativo estable durante todo el año. También, que se cree la figura del bombero forestal, dotándole de formación, medios y condiciones laborales estables. Y que se regule una brigada de investigación, en la que se aproveche la experiencia de los agentes medioambientales, sin necesidad de recurrir a la Guardia Civil de manera constante.