Víctor Antona confiesa que la creación de Flysurf nació de su propia pasión personal. Siempre le ha encantado viajar, conocer mundo y surfear, una afición que se volvió casi una obsesión cuando recaló en Chile mientras estudiaba un máster. “Parece un cliché, pero es un deporte que me ha aportado tanto...Esa conexión con el mar te hace tener un estilo de vida diferente, te vuelve más consciente de todo lo que te rodea”, asegura. Él empezó a surfear ya mayor, y ahí es cuando se dio cuenta de que era un deporte donde el principiante lo tiene complicado. “Es un mundo un poco endogámico, por así decirlo, así que pensé que sería increíble poder dar esa oportunidad a la gente que empieza. Yo muchas veces digo de broma que, si todos surfeáramos, el mundo sería un poquito mejor”, explica.

Con esa idea volvió a España y, después de tres años trabajando en una consultoría, decidió dar el salto y montar Flysurf en 2021. Desde el principio la idea era clara: transformar el proceso de aprendizaje de este deporte en una experiencia accesible, segura y significativa, con unas tablas diseñadas para surfistas principiantes e intermedios.

VENTA B2B

En tiendas especializadas y escuelas de surf

40%

VENTA ONLINE

A través de su web con asesoramiento personalizado

60%

La firma opera principalmente en España y Portugal, con la ambición de saltar al resto de Europa. Tras facturar unos 200.000 euros en 2024, esperan duplicar esa cifra en 2025. El canal online representa el 60% de la facturación, mientras que el otro 40% “surge del B2B, gracias a colaboraciones con tiendas especializadas y escuelas de surf”. El objetivo de Víctor no es solo vender sus productos, sino “acompañar al surfista en su viaje personal, ofreciendo asesoramiento personalizado”. En este camino, el CEO reconoce que tener de aliado a Banco Santander ha sido una pieza clave. “Nosotros fabricamos las tablas en Asia y allí hay que pagarlas por adelantado. Cuando vas creciendo, la inversión empieza a ser mayor, necesitas más capital para ejecutar las compras y ahí es cuando nos acercamos al Santander, para que nos financiaran las compras de mercancía. La verdad es que el proceso fue muy rápido, es una entidad que demuestra que están creyendo mucho en las startups”, explica.

¿Cómo han conseguido crecer en la venta online? “Desde el principio, Flysurf apostó por aportar valor más allá del producto, combinando contenido útil en redes sociales y newsletters con una comunidad fiel que guía al surfista principiante. Este enfoque ha permitido llenar un vacío en un segmento desatendido”, explica su fundador.

APORTAR VALOR

CREAR COMUNIDAD

El crecimiento mediante paid media ha sido eficaz, pero hay otras acciones que también han resultado fundamentales para la empresa, sobre todo las colaboraciones con creadores de contenido. “Hace muy poco empezamos a colaborar con Nico, que es un surfista de Cádiz que ahora mismo está haciendo el reto de surfear todos los días del año, y lo hace con nuestras tablas. Es una persona que tiene bastante impacto”, explica. Para el CEO potenciar la parte offline es fundamental para posicionar la empresa como marca referente dentro del sector. “Por ejemplo, todo lo que son colaboraciones con escuelas nos da una visibilidad y credibilidad brutal. También intentamos colaborar mucho con instructores de surf, que tienen una comunidad súper potente”, asegura.

Uno de los hándicaps a los que se ha enfrentado Flysurf es el tamaño de sus productos. “Nos ha costado tiempo encontrar proveedores que prometan un envío rápido y seguro, y con una URL de seguimiento para nuestros clientes”, reconoce.