Antón: «Hay que hacer todo lo posible para no cerrar escuelas rurales porque la que se cierra no se vuelve a abrir»
José Antonio Antón acaba de ser nombrado director provincial de Educación, un cargo al que le tenía muchas ganas y para el que llega con muchas ideas
Es profesor, pero también político. José Antonio Antón ha llegado a la Dirección Provincial de Educación con una experiencia de veinte años en el mundo de la docencia. Ha sido profesor en el Liceo Castilla, en la escuela rural en Villadiego y en el Cardenal López de Mendoza, donde ha estado los últimos nueve años. Sabe de qué va la gestión política también, pues ha sido concejal del Ayuntamiento de Burgos durante casi ocho años. Defiende el sistema educativo en Burgos, la calidad docente y el saber hacer del equipo de profesionales con el que cuenta en la Dirección Provincial, y que va a dirigir como si se tratar de una junta de gobierno.
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Será reivindicativo con la Junta, pero en su justa medida, pues sabe que los recursos son limitados aunque las necesidades sean ilimitadas. No le asusta su nueva responsabilidad, para la que se ofreció voluntario, públicamente. Eso sí, reconoce que es un reto importante, que asume con ilusión y sabiendo que en sus manos está la educación de todos los alumnos de la provincia (tanto de la escuela pública como de la concertada). Y que de él dependen 4.500 profesores, una plantilla mucho más amplia de la que se puede gestionar en un ayuntamiento.
-¿Cómo ha sido la llegada a la Dirección Provincial de Educación?
La primera semana me dije, dónde me he metido. Al mismo tiempo, sentía el gusto de ver la enseñanza desde arriba. Me decía un inspector, tú has estado al pie de la calle y ahora te has subido a un dron y estás viendo la enseñanza desde arriba. Y es verdad. Estando aquí se comprenden muchas cosas que, estando al otro lado como profesor o jefe de estudios, no las comprendía.
-Viene directamente de la enseñanza y eso le aporta una experiencia.
Estuve once años en el Liceo Castilla. En el 2009 estuve un año en Villadiego y allí conocí la escuela rural. Y en 2010 saqué las oposiciones y me incorporé al IES Cardenal López de Mendoza, donde los últimos cinco años he estado como jefe de estudios. Conozco la docencia. La dirección provincial tiene que estar en contacto con los centros educativos de la provincia y he asumido el compromiso de visitarlos todos, para conocer a los equipos directivos. Son un valor importantísimo porque es difícil encontrar directores y jefes de estudio. Es complicado gestionar los centros educativos. Es algo vocacional que no está ni bien remunerado y ni reconocido.
«Tenemos recursos que son limitados y las necesidades de la gente son ilimitadas, y ese es el problema, que no se puede satisfacer todas las necesidades»
-¿Ya ha tenido contacto con alguno de ellos, ya ha iniciado los contactos con el profesorado?
Sí, circunstancial. Por teléfono, la mayoría. Y a partir de que se incorpore el jefe de Programas (que será ya mismo), vamos a establecer una ruta de visitas para intentar, un día a la semana, coger el coche y recorrer la provincia. Ya han llegado, eso sí, las primeras peticiones. Las obras en los institutos son muy importantes. Tenemos recursos que son limitados y las necesidades de la gente son ilimitadas, y ese es el problema, que no se puede satisfacer todas las necesidades. En el presupuesto de este año en infraestructuras están reservados 800.000 euros para las obras en Secundaria y 627.000 en Primaria.
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-¿Qué prioridades se marca?
La escuela inclusiva, porque todos los alumnos tiene derecho a la igualdad de oportunidades en la educación, con independencia de si tienen necesidades educativas especiales o presentan alguna discapacidad. Atención a la diversidad. Y la escuela rural. Se me pregunta muchas veces con cuántos niños creo que debería mantenerse abierta una escuela. Hay que hacer todo lo posible para no cerrar escuelas rurales porque la que se cierra no se vuelve a abrir. Hay que buscar colaboración en los alcaldes y los agentes rurales para la incorporación de alumnos, porque el cierre de la escuela es consecuencia de la despoblación, no al contrario. Y otra prioridad es la atención a la educación concertada. Somos titulares de la red pública y, por supuesto, es prioritaria, pero la red concentrada supone el 40% de los alumnos en la provincia.
-Son prioridades pero también temas que han generado controversia. Hablando de la escuela rural, genera preocupación entre los padres si la calidad educativa es la misma que en el entorno urbano qué implicaciones puede tener la mezcla de alumnos de diferentes niveles educativos, la socialización...
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La educación es la misma y los profesores salen de los mismos procesos de selección y acuden con la mejor predisposición. La ratio profesor/alumno en la escuela rural es menor y eso redunda en una mejora de la educación. Y los centros rurales, a la hora de recibir medios materiales e informáticos, suelen tener prioridad. Por lo tanto, la educación en los pueblos es igual o incluso mejor que en la ciudad, yo tengo esa sensación. En cuanto a la socialización... a los alumnos de escuelas pequeñas se le dan posibilidades para que acudan a actividades en la ciudad de manera periódica.
-Una de las problemáticas del sistema educativo es elevado número de interinos, que se deja notar más en el medio rural. Es más fácil que se nos vaya el profesorado del medio rural al urbano, ¿cómo podemos garantizar un seguimiento del alumnado cuando hay tanta movilidad del profesorado?
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Los concursos de traslados es un derecho que tienen los profesores, como cualquier otro funcionario. Y la interinidad es una garantía que tiene la administración para cubrir los diferentes puestos. No estoy de acuerdo con la premisa de que contar con muchos interinos redunde en una baja calidad educativa. En primer lugar porque los interinos son gente joven, con más formación y actualización y están, por edad, más cerca del alumnado. Y el propio proceso de selección en las listas de interinos ya supone escoger a los mejores. Los profesores interinos tienen la suficiente competencia y experiencia para poder afrontar esas clases, aunque sí es deseable ir reduciendo las tasas de interinidad. Pero los interinos siempre serán necesarios porque hay plazas que surgen según las necesidades educativas.
«La ratio profesor/alumno en la escuela rural es menor y eso redunda en una mejora de la educación»
-Y ¿cómo podemos garantizar que, al empezar el curso, todas las plazas estén cubiertas y no nos encontremos con alumnos sin profesor?
Hablamos de algo que sucede todos los años y Burgos no es la provincia con más problemas. Los que acceden a la lista de interinos tienen sus derechos, hay unos plazos y trámites que se tienen que cubrir, y eso acumula un retraso y, a veces, se llega al límite. Eso sí, hay casos como en Primaria que hay que resolverlo antes y mi compromiso, para próximos años, es estudiarlo para evitar estas situaciones.
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-Escuela inclusiva, ¿bajo qué modelo? ¿centros especiales, integración en la escuela ordinaria? ¿Cuál va a ser el modelo por el que va a apostar en la Dirección Provincial?
Ambas cosas. Hay alumnos que precisan cuidados especiales, sanitarios o educativos, de apoyo en el aprendizaje, e incorporarlos a un centro convencional les crearía dificultades. Los centros de educación especial deben pervivir y, paralelamente, las personas que se puedan incorporar a los centros ordinarios, con apoyos pedagógicos, deben poder hacerlo. Pero no soy partidario de quitar los centros de educación especial, porque son muy necesarios para los propios alumnos.
-Hablando de educación especial, ¿es consciente de la situación que se vive en la zona norte de Burgos, que recibe alumnos derivados del País Vasco que no encajan en el sistema bilingüe del Euskera?
Sí, soy consciente de que esto ocurre pero no genera ningún problema. También se da en otras zonas limítrofes de la comunidad por otros motivos, por intereses curriculares o por proximidad, por ejemplo. Es perfectamente compatible. Tenemos plazas suficientes, como en el caso de Las Merindades.
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-Hablando de bilingüismo, ¿funciona el modelo de la educación bilingüe en Castilla y León?
Como todo modelo, se puede mejorar. Pero lo que sucede hoy no sucedía hace algunos años. Ahora mismo, para los alumnos el inglés no supone ningún problema. Antes sí. La formación de lengua inglesa es bastante mejor y, además, antes se enseñaba como una lengua muerta y ahora se habla. Se ha perdido el miedo al inglés y hemos superado un estigma generacional. La Consejería de Educación hace un gran esfuerzo. Se ha tenido problemas con la incorporación de asesores lingüísticos y auxiliares de conversación, y trataremos de cubrir las plazas lo antes posible.
-En cuanto a infraestructuras, ¿qué necesidades tiene la provincia?
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El centro de Villímar está muy avanzado. Espero que las obras empiecen este mismo curso. La cobertura en la ciudad es la adecuada. Lo que se necesita más son obras de mantenimiento, dotación de instalaciones deportivas, pero nada que no se pueda ir avanzando en los próximos años.
-Su cargo es mitad técnico, mitad político ¿va a ser un director provincial de Educación obediente con la Junta o reivindicativo para Burgos?
Yo siempre soy reivindicativo pero soy consciente de que estoy en la Junta y que en todas las provincias hay necesidades. Hay que vertebrar que todos los castellanos y leoneses tengan las mismas posibilidades educativas con independencia de dónde residan.
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-¿Qué le decimos a los padres que se quejan de que los niños tienen demasiados deberes?
Seguramente habrá algún caso en el que tengan razón. Igual el equipo docente no se coordina de manera adecuada. Pero creo que los alumnos tienen que trabajar en casa, porque todos lo hemos hecho. El trabajo en casa complementa el trabajo en el centro y crea hábito de estudio.
-¿Tienen demasiadas extraescolares?
Tal vez. Quizás debamos priorizar las enseñanzas regladas. Si a un alumno no le da tiempo a cumplir con su trabajo del colegio no le vamos a meter a ballet, deporte... No digo que no sean buenas, pero en su justa medida. Lo que les aconsejo a los padres es autoestima, autoestima, autoestima. Que a los chicos no les exijamos tanto sino que les demos la suficiente autoestima para que puedan desarrollar sus capacidades.
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«Los interinos siempre serán necesarios porque hay plazas que surgen según las necesidades educativas«
-Le hacemos la entrevista el miércoles, primer día sin cole del macropuentte de Todos los Santos. Es una de las quejas de los padres, las vacaciones escolares y la dificultad de conciliación. ¿Cómo se concilian las necesidades educativas y la conciliación familiar?
El proceso educativo requiere que haya determinados parones para descansar. Integrar periodos vacacionales con periodos de clase. El calendario escolar lo elabora el consejo escolar de Castilla y León, que trata de homogeneizar los trimestres. Además, las vacaciones de verano se van acortando, pero son necesarios esos dos meses de verano porque el juego, la diversión, las socialización son parte de la educación de los niños.
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-Al principio de esta entrevista me confesaba que, nada más llegar al puesto, había pensado dónde me he metido. Pero... ¿usted quería llegar aquí, se había postulado como candidato?
Sí. No me asusta el trabajo, ni el volumen de la dirección provincial. Pero sí que veo que es un trabajo de responsabilidad. Las decisiones que se toman hay que hacerlas con cautela, atendiendo a los técnicos de la casa y sabiendo que lo que tengo entre manos es la educación de la provincia.
-¿Lo habría hecho igual si el PP hubiese mantenido el gobierno municipal?
No lo sé. No sé si me lo hubieran ofrecido. Creo que lo hubiera aceptado igual. Soy bastante transparente y lo había dicho públicamente. De concejal en la oposición podría haber estado muy cómodo. Esto es un reto y un trabajo muy vocacional. Y, aun así, habría tenido la oportunidad de entrar en el gobierno porque creo que, antes de acabar el mandato, se articulará la moción de censura. Casi estoy seguro.
-¿Echa de menos el Ayuntamiento?
Creo que la vida son etapas. Siempre me ha gustado cambiar de trabajo, cada diez años aproximadamente, de trabajo. He estado en el Ayuntamiento ocho años y he trabajado muchísimo, aunque también he tenido muy malos momentos. Ahora tocaba cambiar y es bueno, porque cuando entra alguien nuevo trae siempre cosas mejores, creatividad, ideas.
«Que a los chicos no les exijamos tanto sino que les demos la suficiente autoestima para que puedan desarrollar sus capacidades»
-Las peñas ya le echan de menos
Y yo a ellos. Pero desde aquí haremos cosas. De entrada, el pregonero infantil se promocionará en los colegios y se fomentará que los alumnos presenten un cuento y, de ahí, escoger al pregonero. Estoy a su disposición, lo saben.
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-Y si le pregunto una valoración sobre los cambios de los Sampedros para 2020
Quieren adelantar la Proclamación de las Reinas. Es un acto muy tradicional e institucional que tampoco debe adelantarse mucho. El que se adelante al sábado el día del Burgalés Ausente va a generar un problema, porque las fiestas no pueden terminar un viernes. Sería inaudito que el sábado no acabe con una sesión de fuegos artificiales y con verbena. La concejala (de Festejos, Blanca Carpintero) sabrá lo que hace pero va a tener muchas críticas. Y todo depende del presupuesto que tenga, si tiene más del que tuve yo, seguramente tendrá mejores conciertos y actuaciones. Lo difícil es hacer fiestas con poco dinero, si hay mucho dinero, eso lo hace cualquiera.
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