Burgos registra ocho nuevos fallecimientos y los 41 nuevos positivos superan a las 39 altas

La COVID-19 sigue cobrándose vidas. En Burgos, en las últimas horas el dato de personas fallecidas por la enfermedad ha aumentado en ocho, situándose el total de decesos vinculados con el coronavirus desde que comenzó la pandemia en 69. Si este lunes la provincia arrojaba una de las mayores cifras de fallecidos registradas en un día, hoy ese dato se ha reducido. Este lunes fueron 12 los decesos y este martes, con datos actualizados a las 8 horas, han sido ocho las personas fallecidas.

Este lunes, por otro lado, arrojaba una esperanza, el número de altas superaba al número de nuevos casos confirmados pero esta luz se ha visto apagada por los datos de este martes, aunque la diferencia no sea grande. Con datos actualizados a las 20 horas del 30 de marzo, la provincia ha contabilizado 39 nuevas altas, con lo que el total de altas concedidas de pacientes con COVID-19 se sitúa ya en 215.

En cambio, los nuevos casos confirmados son 41, dos más que las altas concedidas. Además, estos nuevos 41 casos suponen 11 más que los registrados ayer. Es decir, el lunes se registraron 30 nuevos casos y este martes se han contabilizado 41 nuevos casos de COVID-19 en la provincia.

Aún así, aunque los nuevos 41 casos confirmados son once más que los registrados en el día anterior sigue siendo una cifra más baja de nuevos casos que los que se venían arrastrando en los últimos seis días con hasta 93 casos nuevos confirmados en alguna jornada. Como ha señalado la consejera de Sanidad, Verónica Casado, «cuando consigamos el equilibrio entre altas y nuevos positivos será que estamos llegando a la meseta de la curva y será una buena noticia».

El incremento de casos diarios se acumula y ya son 790 los casos que han arrojado positivo en COVID-19. Como apunta Casado, la enfermedad es de declaración obligatoria urgente, por lo que se está haciendo un doble registro. Por un lado están los datos que ofrece la Consejería de Sanidad con los positivos confirmados y, por otro, están los datos de Medora, el sistema informático que gestiona la historia clínica y la receta electrónica. En este último caso se recogen tanto los sospechosos como los confirmados, tanto leves como graves, lo que permite elaborar un mapa por zonas básicas de salud y tener una visión más certera.

En este sentido, englobando los datos de pacientes diagnosticados y los pacientes con sospecha clínica de la enfermedad, el dato en Burgos asciende hasta los 4.143 positivos y posibles positivos por COVID-19, lo que supone 316 personas más que el día anterior.

En el total de Castilla y León el número de casos confirmados desde que empezó la pandemia asciende hasta los 6.211 y el número de fallecidos es ya de 585. Las altas son ya de 1.259 y los nuevos casos confirmados en este martes es de 410. Casado ha señalado que se aprecia «un crecimiento menor de casos confirmados que a finales de la semana pasada cuando el ritmo de crecimiento era del 16 por ciento y ahora nos encontramos, de ayer a hoy, en un crecimiento de casos del 7 por ciento». Eso sí, la consejera de Sanidad ha dejado claro que «estos signos hay que tomarlos con cautela. Seguimos estando en alarma, ahora es más importante que nunca seguir en esta línea para contener la pandemia».

Casado ha apuntado que, de momento, no se están realizando de manera generalizada las pruebas rápidas porque se están comprobando estos test. La consejera de Sanidad ha señalado que «hay que evaluar estos test que nos han llegado para no generar falsos positivos». Los test que están llegando se están testando en los servicios de microbiología para no arrojar falsos negativos.