Arrancan las obras de derribo del Mercado Norte

Hoy es el principio del fin para el Mercado Norte. Tal y como estaba previsto, esta misma mañana se ha firmado el acta de replanteo de las obras de derribo del histórico edificio, que si todo sale según lo previsto será historia de la ciudad de aquí a cuatro meses.

A primera hora, operarios de Erri Berri, empresa adjudicataria de la obra, se han desplegado por el entorno de la plaza Hortelanos, que ha amanecido con numerosos vehículos todavía aparcados, pero que a lo largo de la jornada de hoy quedará completamente cerrada al tráfico. Según ha destacado el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Burgos, Juan Manuel Manso, a partir de ese momento sólo se permitirá el paso de «vehículos autorizados», entre los que se incluyen aquellos que dan servicio a los comercios y cafeterías ubicados en el interior de la plaza. También se habilitará un paso peatonal en la margen izquierda de la plaza mientras duren las obras.

Unas obras que en las primeras semanas apenas serán visibles desde el exterior. Y es que, la primera fase del derribo se centrará en el desmontaje de todos los equipos y estructuras interiores. Algunos de esos equipos, por cierto, se prevé que puedan ser reutilizados para dar servicio al mercado provisional levantado meses atrás a escasos metros, en la plaza de España.

En esta fase también está previsto el desmontaje y gestión del fibrocemento existente en el edificio. En principio, el proyecto no prevé grandes cantidades de amianto, según ha explicado Manso.

Sea como fuere, y una vez culminados los trabajos en el interior, se comenzará el derribo material del edificio. La previsión es que ese trabajo, ya mucho más visible, arranque en la quinta semana de obras. En este sentido, se ha optado por un derribo físico mediante retroexcavadora con cizalla. La demolición se realizará, pues, poco a poco, habida cuenta de que se trata de una zona «muy sensible» y de que la seguridad es prioritaria para el Ayuntamiento.

Los trabajos de demolición comenzarán en las traseras del edificio en la esquina más cercana al edificio Castilla. Desde ese punto se irá avanzando hacia el frente del Mercado Norte. La última zona en ser derribada será la fachada principal y los soportales que miran hacia la plaza de España.

En ese momento, el Ayuntamiento contempla la posibilidad de trasladar «unos metros» la parada del autobús ubicada en la zona de manera provisional. «No cuesta nada mover la parada durante una semana», teniendo en cuenta que hay «espacio de sobra» para hacerlo en el entorno y que «correr riesgos es innecesario», ha subrayado el concejal.

Finalmente, y una vez retirados todos los restos de la demolición, Erri Berri levantará un muro perimetral de hormigón que será decorado. Un muro que, tal y como ha reconocido hoy Manso, estará presente «tres o cuatro año seguro».

Y es que, la construcción del nuevo mercado continúa estando pendiente de cerrar muchos flecos. «La idea es que haya grúas en 2026», ha subrayado el concejal, pero todavía hay que sacar a licitación su construcción y encontrar empresas interesadas en acometer el proyecto. «Tenemos un plan para sacarlo adelante» y «estamos muy pendientes» del asunto, pero aún es pronto para saber cuándo y de qué forma saldrá adelante la actuación, ha concluido.

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