Kravic se queda en el San Pablo

Kravic se queda. Tras varias semanas de incertidumbre, el Hereda San Pablo ha confirmado hoy la renovación del contrato del pívot serbio, que defenderá la camiseta del conjunto burgalés una temporada más después de un primer año más que meritorio en Burgos.

No en vano, Kravic, que llegó al Coliseum el verano pasado procedente del Obradoiro, se hizo muy pronto con un puesto en el esquema de Peñarroya. Su altura y buen hacer bajo el aro le convirtieron en una de las referencias anotadoras del equipo desde su llegada, jugando de inicio en 36 de los 38 partidos de Liga Endesa, en la que promedió 10,7, 4,6 rebotes y 11,3 puntos de valoración por encuentro. También en la Basketball Champions League tuvo un papel destacado, promediando 9,9 puntos, 4,4 rebotes y 13 puntos de valoración por partido de media.

Sus números, sin duda, suponen un aval para su permanencia en el equipo a las órdenes de Tabak y, finalmente, ambas partes han alcanzado un acuerdo para la renovación.

En este sentido, el propio Kravic ha asegurado sentirse «valorado y querido» en Burgos en un año «muy exitoso» que confía en prolongar a lo largo de la futura campaña. De hecho, uno de los grandes objetivos del pívot serbio -con pasaporte canadiense- pasa por hacer de nuevo un gran papel en la Basketball Champions League, después de haber alzado el trofeo en dos ocasiones con el San Pablo y una más con el Virtus de Bolonia. «Un tercer título de BCL para Burgos, y un cuarto para mí, es definitivamente el plan y el objetivo».

Con todo, Kravic confía en poder contar con el apoyo del público en las gradas del Coliseum durante la próxima temporada. «Sería increíble tener a la afición otra vez con nosotros. Los aficionados de Burgos son muy especiales y espero verles en el Coliseum. Ya han esperado mucho tiempo para volver y ellos pueden ser nuestra arma secreta para un éxito más grande y continuado en esta temporada».

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