La Junta estudia nuevas restricciones para contener la pandemia en Burgos

Las restricciones podrán cambiar en función de los datos de incidencia de la covid en cada municipio de Castilla y León. Así lo ha confirmado este martes la consejería de Sanidad, Verónica Casado, que prevé adaptar las limitaciones que contempla el nivel 2 de riesgo a la nueva situación, dado que el comportamiento de esta quinta ola es, por contar con una campaña de vacunación y concentrarse la transmisión en los más jóvenes, «muy diferente» a otras etapas de la pandemia.

Burgos se encuentra en riesgo extremo, junto con Zamora, por lo que la Junta estudia posibles medidas de contingencia aunque, no serían tan restrictivas como las anteriores. La situación, explica Casado, es de transmisión comunitaria.

Casado, ha explicado que la elevación del nivel de alerta no será para toda Castilla y León sino por zonas, que no quiere cerrar la movilidad perimetral «porque sería trasladar la transmisión de zona», y a puntos más limpios. Aunque será el Consejo de Gobierno quien apruebe las nuevas medidas este jueves, lo que se contempla es pasar a nivel 2 en algunos casos, pero no en todos con mayores restricciones.

A Sanidad le preocupa, especialmente, el ocio nocturno y, en particular, el irregular. La vuelta al nivel 2 no sería total porque «penalizaría a algunos sectores donde ahora mismo no se producen los contagios», cuya fuente ahora se encuentra en el ocio nocturno, ya sea o no regulado.

La limitación horaria se está estudiando para Burgos, según Casado. Los servicios jurídicos de la Junta estudian la posible implantación del toque de queda, tomando como ejemplo la Comunidad Valenciana o Canarias, tal y como adelanta la consejera aunque, insiste, «en dos ocasiones lo ha tumbado el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León».

Eso sí, tendría otras características respecto a los anteriores ya que ee establecería por municipios, en función de la evolución epidemiológica y además tendría carácter de «temporalidad», «límite geográfico» y «proporcionalidad», según el impacto sanitario de la incidencia.

Asimismo, Casado señala que se valorará el cierre del ocio nocturno, cuya apertura está limitada ahora hasta las 2 de la madrugada, sin poder servir a nuevos clientes desde la 1.

Aunque los últimos datos revelan que el contagio es exponencial entre los jóvenes, el problema es que se está extendiendo a otros grupos de edad, especialmente entre los 60 y los 69. Sin embargo, la hospitalización se mantiene estable, aunque con más ingresos, y es Atención Primaria la que está desbordada en estos momentos.

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