Los taludes del monasterio están plagados de maleza. JCR

Burgos opta por la vegetación autóctona para mejorar los taludes del monasterio de San Francisco

La mejora tendrá una estructura prefabricada para sustentar la tierra de los terraplenes, se resembrará y se enfoscará el muro de apoyo que ya existe

Viernes, 4 de julio 2025, 07:22

La concejalía de Patrimonio y Hacienda del Ayuntamiento de Burgos contratará con la empresa Construcción, Arte y Restauración Garsan la instalación de un muro vegetal y la siembra en el talud de contención de la cimentación del Monasterio de San Francisco.

Publicidad

Se trata de instalar un muro vegetal de contención mediante piezas prefabricadas horizontales de forma que se sustenten las tierras del talud que soporta la cimentación de las ruinas del antiguo convento de San Francisco. Posteriormente se realizará la siembra de plantas autóctonas de bajo mantenimiento y se enfoscará y pintará el muro de apoyo existente.

El coste de la actuación es de 42.229 euros y Patrimonio ha optado por realizar un contrato menor por esta actuación. Según el proyecto de restauración se estima que los taludes perimetrales a ambos lados se ajardinen con vegetación tapizante sin riego, para mejorar su estabilidad y estética.

Con las lluvias se produjo un estallido de vegetación en los taludes que sostienen las ruinas del monasterio. Previo a esta actuación prevista con el contrato con Garsan, se ha procedió a la siega de parte de la maleza del talud suroeste.

La restauración de las ruinas

Las obras de restauración de las ruinas del antiguo convento de San Francisco de Burgos terminaron en abril de 2024. Desde esa fecha, el interior del monasterio se ha deteriorado, ha crecido maleza y está lleno de restos orgánicos de las cigüeñas y ramas caídas del nido de la parte alta del muro.

Publicidad

En la primavera del año pasado, el concejal responsable del área de Hacienda y Patrimonio, Ángel Manzanedo, aseguraba que todo estaba a «falta de unos detalles». Sin embargo, 14 meses después el espacio cultural sigue sin uso y el Ayuntamiento de Burgos está a la «espera», reconoce Manzanedo, a que termine la actuación para también «limpiar el interior del recinto» que se ha llenado otra vez de maleza.

El proyecto terminado el año pasado centró en consolidar los muros, recuperar el solar y dedicar, con otros proyectos de carácter cultural, un nuevo recurso para la ciudadanía.

Accesibilidad

Mientras en el invierno pasado se llevó a cabo la colocación de la iluminación de las paredes exteriores, no se han llevado a cabo otras recomendaciones que figuran en el proyecto. Unos consejos que podrían hacer más fácil la accesibilidad para personas con movilidad reducida o con problemas de visión.

Publicidad

El proyecto aconsejaba «mejorar el diseño del cruce» que está enfrente de la esquina del monasterio, ejecutado con pavimento podotáctil «únicamente de botones» tanto en el borde como en el encaminamiento. El diseño actual «conduce a la curva y el paso de peatones está dispuesto en una dirección oblicua», que las personas ciegas no pueden detectar, ya que se trata de líneas sin relieve, pintadas sobre la calzada.

Por eso se pide que se instalen «elementos podotáctiles sobre el borde lateral del paso de cebra» o bien rediseñarlo para disponerlo en perpendicular al borde de la acera. indicar el recorrido hasta alcanzar la línea del perímetro de la edificación.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad