Las palomas toman un Burgos vacío por la cuarentena del coronavirus
Las calles del centro de Burgos presentan una imagen insólita, sin casi burgaleses y con alta presencia de militares y policías para garantizar el confinamiento
Burgos afronta el décimo día de confinamiento impuesto por el estado de alarma activado por el coronavirus. Y lo hace con calles vacías, con mínima presencia de burgaleses, que se desplazan por cuestiones básicas: empleo, alimentación, medicamentos o atención a mayores, dependientes o niños. Policía Local, Policía Nacional y el Regimiento de Ingenieros Nº1 vigilan que solo salgamos de casa por necesidad.
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Así, las palomas campan a sus anchas, con moderación, por las calles desiertas, una imagen completamente insólita que se tienen que mantener, como mínimo, hasta el 11 de abril. La clave de la lucha contra el coronavirus es la cuarentena social, de todos, por todos y para todos. #YoMeQuedoEnCasa.
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