España copa los premios de la Academia Internacional de Gastronomía
José Andrés consigue el Gran Premio de Cultura; Begoña Rodrigo, el de Cocinera del Futuro y Paco Torreblanca es el mejor pastelero
guillermo elejabeitia
Madrid
Lunes, 3 de febrero 2020
La Academia Internacional de Gastronomía se reunió en París para fallar sus galardones anuales y el resultado no pudo ser más favorable para la cocina española. La institución que engloba a 24 academias gastronómicas de todo el mundo -desde Estados Unidos a Japón, pasando por Perú, Italia o Indonesia- otorga cada año cuatro grandes premios a los mejores profesionales de cocina y sala, además de a la cultura y a la ciencia de la alimentación. Pues bien, en dos de la cuatro categorías reinas el ganador lleva este año apellido español.
El Gran Premio a la Cultura Gastronómica fue a parar al asturiano afincado en Estados Unidos José Andres, que asuma así un nuevo hito a un palmarés interminable. Considerado una de las personas más influyentes del mundo por la revista 'Time' y escogido como chef del año por la Fundación James Beard, gestiona exitosos restaurantes en Washington, Miami, Las Vegas, Los Ángeles o Puerto Rico. Pero además de ser uno de los cocineros españoles con más proyección internacional -fue condecorado por Barack Obama y se enfrentó en los tribunales a Donald Trump- José Andrés ha desarrollado en los últimos tiempos una importante labor humanitaria a través de su ONG World Central Kitchen que le ha valido el reconocimiento de las academias culinarias del mundo.
El otro Gran Premio con nombre español distingue la contribución en la Ciencia de la Alimentación de Gregorio Varela, presidente de la Fundación Española de la Nutrición. Catedrático, académico y autor de una quincena de obras sobre gastronomía saludable, remata un currículo intachable con un galardón que ha distinguido a lo largo de su historia al cardiólogo Valentín Fuster, el crítico de vinos Robert Parker o a la escuela de cocina de Michel Gerard.
Cocina, repostería, sala y edición
Pero además de estos cuatro grandes, la academia reparte una batería de distinciones que pueden tener varios ganadores en las que también ha habido un amplio protagonismo español. En la categoría Chef del Futuro está Begoña Rodrigo, que recibe el reconocimiento internacional tres meses después de conseguir una trabajada estrella Michelin. Ingeniera industrial de formación y sin tradición hostelera en su familia, la valenciana abrió en 2005 La Salita con ganas de tocar la cumbre y no ha parado hasta conseguirlo. Hace unas semanas presentó en Reale Seguros Madrid Fusión un interesante trabajo en torno a los tubérculos que podría marcar tendencia. Ojo porque el premio que ahora recoge lo obtuvo en 1997 todo un Martín Berasategui.
Y una leyenda de la pastelería como Paco Torreblanca ha visto como la Academia Internacional le distingue como mejor chef repostero. Un premio joven -comenzó a otorgarse en 2016- que ya han recibido otras figuras nacionales como Jordi Roca u Oriol Balaguer.
Aún hay más. La histórica sala de Zalacaín también se ha sido reconocida en la persona de su sumiller jefe, Raúl Miguel Revilla, discípulo aventajado del mítico Custodio Zamarra, de quien tomó el testigo hace ya casi dos décadas. El trabajo editorial de Josep Roca y Rafael Ansón materializado en el libro 'Los cocineros del vino' también ha recibido premio, mientras que el grupo '¡Hola!' fue recompensado por su labor de divulgación gastronómica a lo largo de sus 75 años de historia.