Marcos González vuelve al Tubos Aranda

Marcos González vuelve a su casa tras cursar sus estudios universitarios en Salamanca buscando una oportunidad en el primer equipo del Tubos Aranda. Repleto de ilusión y muchas ganas de trabajar, el arandino buscará convencer a Alberto Suárez.

Baluarte defensivo del Balonmano Ciudad de Salamanca durante las últimas cinco temporadas en Primera División, Marcos ha crecido mucho como jugador. Su altura de 1.92 m y peso de 94 Kg, además de su juventud, ya que tan solo cuenta con 23 años de edad, lo convierten en un diamante que Alberto Suárez podrá pulir en el engranaje defensivo del Tubos Aranda en el puesto de pivote.

La llegada de Marcos González al primer se viene preparando desde hace tiempo. De esta manera, el canterano formado en la estructura de base del Villa de Aranda, retorna a casa para continuar disfrutando del 40×20.

Una gran noticia que servirá para completar la plantilla del primer equipo en 17 jugadores. «Llevábamos tiempo siguiéndole e intentando que volviera a casa», apunta Alberto Suárez. El técnico asturiano espera con los brazos abiertos al pivote arandino: «Cuando te llama y te dice que ha llegado el momento y que está loco por volver al Príncipe, a su club, y a su Aranda, pues te llevas una gran alegría».

Sin duda, la llegada de Marcos viene muy bien para apuntalar el sistema defensivo del cuadro amarillo en Plata. «Marcos es un jugador que destaca sobre todo por su capacidad defensiva donde con su 1,92m y su velocidad y calidad de desplazamiento, nos puede ser de una gran ayuda para completar la zona central defensiva, además la posibilidad de contar con un tercer pivote, puesto donde no tenemos a corto plazo recambios en la cantera (Juan el talentoso pivote juvenil hará parte de la pretemporada pero se va a estudiar un año a Irlanda), nos da mejor rotación con Javi y Miralles; pero sobre todo vuelve un arandino y con hambre de balonmano y eso es un lujo para nosotros», afirma el técnico.

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