Las ejecuciones hipotecarias se desploman en Burgos en 2022
Según los datos del INE la cifra total de estas ejecuciones en viviendas es de 47 en la provincia, frente a las 76 del pasado año
El año 2022 ha sido, según indica el INE, el ejercicio en el que menos ejecuciones hipotecarias se tramitaron desde 2014 en Burgos. En total, fueron 47 las ejecuciones hipotecarias tramitadas sobre viviendas en la provincia de Burgos, un 38% menos de las que se produjeron en 2021, cuando esta cifra ascendió hasta las 76.
La bajada es considerables si se compara con los años inmediatamente anteriores a la pandemia de la covid-19. En 2020 se tramitaron 89 ejecuciones hipotecarias, mientras que en 2019 esta cifra asciende hasta 157.
Sin embargo, hay que echar la vista atrás para hallar el peor dato de la provincia en cuanto a estas tramitaciones. Fue en 2014, en pleno estallido de la crisis inmobiliaria y primer año del que se tienen estadísticas, cuando el número se disparó hasta superar el medio millar (502), mientras que en 2015 la cifra a punto estuvo de alcanzar las trescientas ejecuciones (295).
Los datos más bajos, sin contar los dos últimos años, se produjeron en 2017. En aquel ejercicio se llevaron a cabo 79 ejecuciones hipotecarias, lo que supone, todavía, 32 ejecuciones más que en este último año.
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Pero la estadística no se queda únicamente en las viviendas. Las ejecuciones hipotecarias sobre todos los tipos de fincas marcó en 2022 la cifra más baja desde que existen registros. En total, en la provincia se tramitaron 117 ejecuciones hipotecarias, muy lejos de las 1.116 registradas en 2014. En la estadística se incluyen diez fincas rústicas, 13 solares y 47 fincas de otro tipo.
Tendencia general
Esta tendencia también se mantiene a la baja en Castilla y León, donde se produjeron 382 ejecuciones hipotecarias en 2022 frente a las 419 de 2021 o las 574 de 2020. Más lejos quedan aún las cifras de 2014 (2.675) y 2015 (1.907).
Además, según las estadísticas del INE, en 2022 se registraron 14.148 ejecuciones hipotecarias sobre viviendas en España, un 6,5% menos que las registradas el año anterior, lo que supone que la bajada de estas ejecuciones ha sido algo generalizado y no solo en la provincia de Burgos, aunque esta bajada haya sido más marcada en tierras castellanas.