Esperan documentar 100.000 años de ocupación neandertal en la excavación de Estatuas Exterior en Atapuerca

El equipo de investigación de Atapuerca (EIA) sigue trabajando en el yacimiento de Estatuas Exterior con el objetivo de reconstruir una secuencia de ocupación humana que abarque hasta 100.000 años de presencia neandertal. Así lo explicó este lunes, 14 de julio, uno de los codirectores del proyecto, Ignacio Martínez, durante la visita a los yacimientos, en la que presentó los avances de la campaña 2025 en esta zona del sistema kárstico de Cueva Mayor.

Estatuas Exterior comenzó a excavarse en 2020 y se sitúa junto a la entrada colmatada de una antigua cavidad que comunica con el yacimiento de Estatuas Interior, donde se hallan restos de neandertales datados entre los 110.000 y los 80.000 años. Según indicó Martínez, este nuevo yacimiento se encuentra «en su infancia científica», pero muestra ya una gran potencia estratigráfica, con hasta 19 metros de sedimento, y un enorme potencial de estudio.

Los investigadores han identificado dos niveles arqueológicos principales. El más profundo contiene industria lítica con bifaces que, según explicó Martínez, podría situarse en el tránsito entre el final del Achelense y el inicio del Musteriense, lo que abriría la posibilidad de conectar cultural y cronológicamente a los neandertales con sus predecesores, los Homo heidelbergensis. El nivel superior, más cercano al techo del sedimento, presenta un conjunto de piezas de talla muy pequeñas, en su mayoría esquirlas, que apuntan a un uso del lugar como taller de producción lítica. «No tenemos apenas fauna, pero sí miles de fragmentos de talla. Es un trabajo muy lento», señaló el codirector.

El yacimiento, que actualmente se excava en una superficie de unos 20 metros cuadrados por un equipo de una veintena de personas, se encuentra en una fase temprana pero muestra un gran potencial. Según indicó Martínez, el sondeo revela hasta 19 metros de sedimento acumulado, lo que permitiría, a largo plazo, documentar una secuencia completa del Musteriense en Atapuerca, algo «único en Europa», donde lo habitual es encontrar yacimientos con un único momento de ocupación neandertal.

Los trabajos incluyen ya la toma de muestras para dataciones, aunque por el momento no se dispone de cronologías precisas. Los especialistas en industria lítica identificaron en el nivel superior una tecnología correspondiente al Musteriense pleno.

«Estatuas Exterior y Cueva Fantasma representan el futuro de Atapuerca», subrayó Martínez, quien recordó que, mientras los yacimientos de la Trinchera acumulan más de tres décadas de investigación, estos nuevos enclaves apenas comienzan a mostrar su potencial. «Estamos viendo la infancia del yacimiento», remarcó.

Por su parte, el también codirector Juan Luis Arsuaga subrayó la relevancia de Estatuas Interior, el yacimiento contiguo, que permitió la publicación de resultados «históricos». Entre ellos destaca la recuperación de ADN humano directamente de sedimentos, sin necesidad de restos óseos visibles. «Es la primera vez que se secuencia ADN de neandertales a partir del sedimento en un yacimiento sin fósiles», afirmó.

En total, los análisis han permitido identificar material genético de al menos cinco individuos neandertales. Además, se recuperaron dos restos óseos, un diente y una falange de pie, en el mismo nivel, lo que refuerza la hipótesis de una ocupación prolongada y estable de la cueva. «Ahora estamos ampliando la excavación hacia la entrada, donde esperamos localizar nuevos fósiles, porque ya hemos encontrado el ADN; ahora faltan los huesos», añadió Arsuaga.

El equipo del EIA considera que Estatuas Interior es uno de los yacimientos más prometedores y valiosos de la sierra, tanto por la calidad de sus hallazgos como por su potencial para reconstruir la vida de los neandertales en el norte peninsular.

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