Burgos comienza a tener indicadores sanitarios de la 'nueva normalidad'

La evolución de la pandemia de la covid-19 en Burgos mantiene su dinámica positiva y algunos indicadores epidemiológicos comienzan a presentar datos que llevan al optimismo. De hecho, algunos de esos indicadores ya se encuentran en valores de la llamada 'nueva normalidad' o están muy cerca de alcanzar ese hito por primera vez en mucho tiempo.

Sin duda, los datos más esperanzadores son los vinculados a la incidencia acumulada de los mayores de 65 años, un grupo de población en el que la campaña de vacunación masiva está dando resultados en los últimos meses. Así, la incidencia acumulada a siete días en ese grupo de población se sitúa hoy en los 9,33 casos por cada 100.000 habitantes, por debajo de los 10 casos que marcan el paso entre la 'nueva normalidad' y el nivel de riesgo bajo.

Se trata de la primera vez que se alcanza este hito desde que la Junta de Castilla y León pusiera en marcha la nueva clasificación de los niveles de riesgo en noviembre del año pasado. Desde entonces, la incidencia a siete días de los mayores de 65 años llegó a alcanzar valores de hasta 831 casos de covid-19 en la provincia de Burgos.

La significativa mejoría de los datos acumulados a siete días viene de la mano de la reducción de la incidencia a dos semanas. En este caso, Burgos presenta ahora mismo una incidencia de 24,48 casos por cada 100.000 habitantes en este grupo de edad, lo que deja a la provincia muy cerca del nivel de 'nueva normalidad', establecido en los 20 casos por cada 100.000 habitantes, después de haber alcanzado valores de hasta 1.401 casos en noviembre del año pasado.

Asimismo, el porcentaje de ocupación de camas hospitalarias de la provincia también se sitúa muy cerca de rebajar el nivel de riesgo y entrar en valores de 'nueva normalidad'. En este caso, los enfermos covid ocupan ahora mismo 19 camas en los hospitales de la provincia, lo que supone un 2,03% del total, mientras que la barrera para bajar de nivel de riesgo se sitúa en el 2%.

No obstante, la provincia aún presenta algunos indicadores preocupantes. Quizá, el más significativo sea el escaso índice de trazabilidad, que se sitúa en un 56,09% (riesgo medio), el porcentaje más bajo de toda la comunidad autónoma y muy alejado de las exigencias de la 'nueva normalidad', establecidas en un 80% de trazabilidad.

También preocupa la incidencia acumulada general. Y es que, a pesar de que el grupo de edad de mayores de 65 años presenta una buena evolución, el resto de franjas de edades lastran la estadística general, con una incidencia de 113,8 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, la tercera más alta de toda la comunidad autónoma.

En todo caso, Burgos aún está lejos de la situación que presentan provincias como Soria y, sobre todo, Salamanca, que ya cuentan con varios indicadores dentro de los límites de la 'nueva normalidad'. De hecho, desde hace ya varias jornadas, la incidencia acumulada a 14 días de los sorianos mayores de 65 años es cero.