Campeones en lo deportivo y en lo humanitario
Los burgaleses José Rodríguez y Eduardo Peña, en su primer raid, se alzan con la victoria en su categoría del Maroc Challenge y reparten 60 kilos de material escolar y deportivo
Muchas instantáneas se han traído de Marruecos los burgaleses José Rodríguez y Eduardo Peña en sus móviles. Imágenes para el recuerdo que inmortalizaron a principios de diciembre cuando compitieron y ganaron por primera vez un raid con su todoterreno en el equipo P&R Adventure Racing. Pero no fue esa victoria de la que presumen estos dos empleados de Land Rover Fausto Motor, ya que lo humanitario tomó, como tenían previsto, un cariz singular al descubrir el poder de una sonrisa entre los más desfavorecidos.
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Su primera historia no tiene que ver con el momento en el que cruzaron la línea de meta después de 7 etapas de 7 horas cada una. Ni cómo libraban las dunas o se desenvolvían en la nieve en la cordillera del Atlas. Su primer recuerdo se originó al finalizar una de las etapas, cuando paseaban por una zona de minas abandonadas. Allí se encontraron con tres niños, repartidos en dos bicicletas. La casualidad hizo que los dos burgaleses portaran una bici pequeña, que se la entregaron en el momento, dando paso a un mar de sonrisas entre todos los presentes. «Nos impactó bastante ver las caras de alegría del niño, amigos y familiares. Es nuestra imagen más emocionante del raid», afirma Rodríguez.
Y es que la idea que barajaban estos intrépidos aventureros era competir en la prueba deportiva, denominada Raid Maroc Challenge, y buscar una excusa para cargar su vehículo de material escolar y deportivo y repartirlo a una ONG que trabaja en Marruecos. Así estuvieron las primeras jornadas, pues hasta la tercera no hicieron el acto de entrega a la asociación rural Ouled Mbarek Arfoud de los 60 kilos que llevaban en la parte trasera de su vehículo. «Se nos ha quedado en la retina la miseria que hemos visto. Cuando estábamos en la cordillera del Atlas, a 2.000 metros de altitud, nevaba mucho y vimos en poblados a muchos niños sonrientes, pero sin abrigo y con chancletas», rememora una vez de vuelta a su trabajo Rodríguez.
Experiencia dura, intensa, pero muy gratificante, que ha marcado a la pareja Rodríguez y Peña, que están en un proceso de interiorizar el logro antes de plantearse futuros retos. «Aún no pensamos en el próximo año. Tenemos que asimilar lo vivido, pero aún no hemos decidido nada», relata el burgalés.
Ahora es momento de seguir interiorizando conceptos, porque durante la semana de competición, los conocimientos han aumentando a la par que consumían etapas. «En lo deportivo ha sido una sorpresa para todos. Nuestro objetivo era terminar y repartir todo el material que llevábamos. Según iban pasando los días, nos íbamos adaptando a la prueba y aprendíamos mucho sobre la marcha, sobre todo de la conducción sobre las dunas. No hemos cometido ningún error y hemos sido regulares», rememora Rodríguez, que ha contado con el apollo empresarial de Plaselec, Ryme Automotive, Grúas y montajes Odra, Fundiciones Julcar, Uno Publicidad, Repuestos Kuki, Talleres RST, Amabar y Decathlon.
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