Muere Uti, el último gran ebanista de Burgos

Un artista integral y, sobre todo, una buena persona. Son los conceptos que mejor definen a Eutimio Ordóñez. Atraído desde niño por la artesanía de madera, compaginó el aprendizaje del oficio en los talleres más sobresalientes de Burgos en los años 60 y 70 con sus estudios en la Academia Provincial de Dibujo, donde también destacó por su destreza con el trazo, como bien demostraría después en varias exposiciones.

En 1970 montó su propio taller en la ciudad de Burgos, desde donde comienza a realizar piezas únicas de madera y escudos heráldicos, especializándose en muebles españoles de los siglos XV al XIX donde él introduce toques creativos. Esos muebles viajan por toda España y buena parte de Europa…

La obra de su taller se empieza a difundir públicamente y su labor comienza a ser reconocida en su tierra, al tiempo que la labor de Ordóñez trasciende a otros lugares como País Vasco, Castilla-La Mancha o Andalucía donde el burgalés cosecha importantes premios en certámenes destacados como los de las ciudades de Bilbao, Guadalajara o Jaén, entre otros.

Su personal estilo lleno de fuerza y amor por el trabajo bien hecho es producto de una dilatada experiencia que confiere a sus obras la categoría de arte. A ello se suma el amor por su tierra, por el Burgos de su niñez y su madurez. Además de las raíces que le vinculan, también a la localidad de Valdorros, donde pasó parte de su vida y donde le homenajearon recientemente al cumplir 80 años.

Entre sus muchas exposiciones, cabe destacar: Campo Grande (Valladolid, 1999); Palacio Ferial (Bilbao, 2000); Ayuntamiento de Valdorros (Burgos, 2001), Teatro Principal (Burgos, 2002), y la que realizó en el año 2019 en el Monasterio de San Juan; la última de todas.

Dedicado a la pintura, intenta recuperar los rincones del Burgos de su niñez y juventud para que esos espacios tan suyos no pierdan sentido.

Tío del también recordado fotógrafo burgalés, Félix Ordóñez, y del fotoperiodista Ricardo Ordóñez, afirmaba ser «un enamorado de los rincones del viejo Burgos, de ese lenguaje castellano puro y recio, y de la figura del Cid».

En su taller, ubicado en el barrio de San Pedro de la Fuente, esperan desde hace años muchas obras icónicas del artista, como un retablo de la vida del Cid, que Ordóñez esperó adquirieran las administraciones competentes para disfrute de los burgaleses. Una pieza única en el mundo que lleva la impronta de un hombre único.

El funeral por Uti para darle el último adiós se celebrará este viernes en el Tanatorio de San José a las 16.45 horas.

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