Ryanair y Sevenaire, entre las opciones para reactivar los vuelos desde Burgos
Promueve Burgos está pendiente de recibir propuestas concretas de algunas de las empresas interesadas y, cuando disponga de la información, decidirá si licita el nuevo concurso
El futuro comercial del Aeropuerto de Burgos sigue en el aire. Mientras la escuela de pilotos FlyBy sigue funcionando a muy buen ritmo, la infraestructura continúa sin vuelos comerciales desde la marcha de Air Nostrum. Y de momento no se ha tomado ninguna decisión sobre el nuevo contrato que permitiría recuperar la actividad, preferentemente con un operativo regular, anual, de vuelos nacionales e internacionales.
Actualmente, Promueve Burgos está analizando a las diferentes empresas que han mostrado interés por volar desde el aeropuerto y se da como plazo este primer trimestre para tomar una decisión. Si ven que hay opciones, se sacará el nuevo contrato, pero si no convence ninguna de las propuestas, se dejará de momento. Eso sí, «no se cierran todas las puertas, ni nos olvidamos para siempre».
Así lo ha explicado el presidente de Promueve Burgos, Vicente Marañón, quien mantiene contactos con todos los interesados. En diciembre, Marañón visitó a la compañía portuguesa Sevenair, que cuenta con escuela de pilotos, mantenimiento de naves y opera con aviones de 18 a 30 plazas en conexiones regulares entre ciudades portuguesas, incluidos vuelos en Madeira.
Marañón reconoce que los aviones con los que cuenta «son muy pequeños, sin presurizar, muy ruidosos» y muy lentos, tanto que un vuelo a Barcelona podría durar hasta tres horas. Lo positivo de la oferta de Sevenair es que quiere internacionalizarse y se plantearía entrar en el mercado español a través de Burgos, asentando aquí un avión con su tripulación.
Con los portugueses se quedó en que presentasen una propuesta concreta para estudiar. Mientras, el presidente de Promueve Burgos también va a reunirse con Rynair, aunque sigue siendo muy «escéptico» sobre las posibilidades del aeropuerto. La compañía exige un coeficiente de ocupación muy alto y, por experiencias anteriores, sería complicado cumplirlo. Aun así, «por hablar, que no quede».
Air Nostrum quiere volver
Por otra parte, Air Nostrum ha vuelto a manifestar su interés por volver a Burgos. Tras acordar el consejo de administración de Promueve Burgos que no se aprobaba la última prórroga del contrato suscrito, la filial de Iberia ha insistido en su propuesta. En las mismas condiciones en las que estaba, podrían volver mañana mismo, explica Marañón.
Y si se acepta la última propuesta presentada, a escasas horas de tomarse la decisión sobre la prórroga, se compromete a empezar a operar en septiembre. Se planteaba un vuelo los jueves con salida de Barcelona a las 8:30 y vuelta desde Burgos a las 10:15. Y los viernes y domingos saldrían de la ciudad condal a las 14:40 y de Burgos a las 16:26. Una oferta mejor que la actual.
A estas tres empresas se les suman los planteamientos de dos inversores españoles vinculados al ámbito de la industria aérea, aunque ninguno tiene compañía, ni comercializadora, ni distribuidora ni ofrecería conexiones. Y la propuesta de la compañía mallorquina Uep Fly, que cuenta con dos aviones, que viajarían a Burgos y, desde aquí, se realizarían conexiones.
Vicente Marañón ha insistido en que analizarán todas las propuestas y, si ven opciones, sacarán el concurso, aunque su resolución se retrasaría al verano. De lo contrario, se cerraría este capítulo aunque no sería un adiós definitivo. «Si detectamos un oportunidad o nos la proponen, se sacarían los pliegos». De hecho, se han reservado 900.000 euros en el presupuesto de 2022 para este concurso.
