Fin de la imbatibilidad y triunfo a lo grande en el derbi burgalés

Lo hizo en medio de una ovación porque su roja llegó tras una espectacular mano a Raúl García para evitar el gol de Mirandés en una jugada en la que, sin su intervención, el balón habría terminado en el fondo de las redes. Pero la mano llegó fuera del área y, por tanto, supuso la expulsión del jugador.

También se acabó la imbatibilidad del Burgos CF, que recibió su primer gol del campeonato. Pero para eso todavía faltaba mucho.

Hasta la expulsión de Caro, sobre el césped de El Plantío había pasado más bien poco. El partido había transcurrido hasta el minuto 23 sin muchas ocasiones, con un Mirandés que buscaba salir de la situación apretada en la que se encontraba hundido en la penúltima plaza de la clasificación, mientras que el Burgos CF, desde las cómodas plazas del play off, se encontraba cómodo sobre el césped.

Tuvo que esperar la afición hasta el minuto 23 para ver la primera oportunidad de verdad de gol. Cayó del lado del Burgos CF, quien hasta ese momento había visto cómodamente cómo el balón era del Mirandés en una posesión estéril.

Fue entonces cuando Matos buscó por abajo a Valcarce, pero Parra se adelantó y cortó el balón enviándolo a córner. Fue Curro el encargado de botar el balón desde la izquierda de la portería defendida por Alfonso Herrero y a punto estuvo Zabaco de conectar con el esférico en el palo largo, pero el balón se perdió rozando la madera.

Parecía que el Burgos CF se animaba en estos minutos, y fue entonces cuando se encontró con el gol, de nuevo en El Plantío, donde marca la mayoría de los goles que ha conseguido hasta ahora. Gaspar Campos, que repite como goleador esta temporada, remató con la derecha desde el centro del área para batir a Herrero y desatar la locura de la parroquia blanquinegra.

Con el 1-0 el el Mirandés se estiró y llegó la jugada de la expulsión de Caro, que obligó a Calero a quitar del campo al referente más ofensivo, Valcarce, para hacer debutar a Dani Barrio. La falta con la que se cobró la tarjeta roja de Caro no supuso mayor problema para la zaga blanquinegra, esta noche de rosa. Raúl García estrelló el balón en la barrera y se disipó el peligro. Sin embargo, no sería la única oportunidad de los jabatos en esta primera mitad. El Burgos con uno menos sufrió las embestidas de un Mirandés que quiso aprovechar la superioridad numérica.

En el 34 probaron a Dani Barrio, que tuvo que estirarse para sacar el disparo de Roberto López que quería colarse por la escuadra. Apenas unos minutos después fue Raúl García quien volvió a probar a Dani Barrio que tuvo que volver a responder al lanzamiento.

A pesar de que el Burgos sufrió en estos últimos minutos de la primera mitad logró llegar al descanso manteniendo la ventaja en el marcador.

Tras la reanudación, el Mirandés dio un paso al frente y buscó probar a Barrio, que honró el puesto que le había cedido Caro con paradas meritorias. Como la manopla abajo que tuvo que sacar para que Prados no lograra el empate. Más tarde fue Pinchi quien, de cabeza, le puso a prueba.

Matos tuvo que echar una mano al cancerbero en la labor de despeje en el minuto 57, cuando el Mirandés hacía efectiva la superioridad y dominaba el esférico con peligro volcados sobre la portería burgalesa.

Pero en el minuto 60 el juego tuvo que ser parado. La grada lateral reclamaba a las asistencias médicas. Hasta allí avanzaron los servicios médicos de Burgos CF y CD Mirandés para atender a un aficionado junto a la Cruz Roja. El aficionado tuvo que ser evacuado en ambulancia tras 13 agónicos minutos en El plantío.

Una vez se puso en marcha de nuevo el partido, Calero dio entrada a Mourad, Raúl Navarro y Mumo para tratar de sacudirse la presión a la que se estaba viendo sometido. Los minutos transcurrieron sin grandes oportunidades hasta el 93, cuando el Mirandés hizo lo que nadie había conseguido hasta ahora, batir al Burgos CF.

Marcos Paulo centró un balón desde la lateral a la izquierda de Dani Barrio, el balón fue cogiendo portería y, aunque nadie fue capaz de conectar con el balón, acabó entrando en la portería tras tras botar en el área pequeña.

Lo intentó el Burgos CF en los minutos finales, 14 añadió el árbitro por los minutos que el juego estuvo parado. Y aunque parecía que todo iba a terminar en tablas, el premio llegó para los burgaleses en el 102, cuando Mourad consiguió estrenar su casilla goleadora con un remate con la derecha desde el centro del área que coló sin que Alfonso Herrero pudiese hacer nada y que sirvió para dejar los tres puntos en casa en un partido que tuvo de todo.