Tablas en San Amaro

El Recoletas Burgos Universidad de Burgos solo ha podido certificar un empate en el encuentro ante Ampo Ordizia de este Domingo de Ramos. Y es que, aunque los burgaleses los tuvieron todo para hacerse con la victoria que certificase prácticamente su plaza de play off, dieron alas a los visitantes en con el tiempo cumplido permitiéndoles disponer de un golpe de castigo que Lander Mujika no desaprovechó.

Antes, el partido comenzó con unos locales que salieron mandones a San Amaro y que quisieron empujar desde el inicio a Ordizia hasta su campo. Pronto dispusieron los gualdinegros de la primera ocasión para tratar de adelantarse en el marcador. Un tiro a palos que Tomás Carrió transformó en el minuto 6:30 de juego para poner el 3-0 en el marcador.

El Ampo Ordizia parecía conceder ocasiones en estos primero minutos. Apenas habían transcurrido 10 de juego cuando en una situación sencilla de juego permitió de nuevo un pateo de Tomás Carrió que pasó el segundo oval entre los palos para poner el 6-0 en el marcador.

Parecía que el partido tomaba color, el de los burgaleses, pero Ordizia se estiró en el campo y obligó a Recoletas Burgos a tener que juntarse para defender en su propio terreno de juego. En el minuto 26 de partido Alejandro Luna vio la tarjeta amarilla por juego sucio en una situación ventajosa para los locales. Sin embargo, lejos de que esto se convirtiera en un contratiempo pareció dar alas a los de José Ignacio García.

Tomás Carrió continuó con su lección sobre cómo transformar los tiros a palos y volvió a pasar el oval entre los tres palos para poner el 9-0 antes de que Luna volviese al terreno de juego. Pero los vascos querían ser invitados a este particular festival del puntapié y Lander Mujika se convirtió en la réplica perfecta de Carrió.

De esta manera Ordizia comenzó a recortar ventaja en el marcador. Primero con una patada casi desde el medio campo que supuso el 9-3. Después, con otro nuevo puntapié de castigo que cerró la primera mitad con un 9-6 en el marcador y todo por disputar.

Tras el descanso, Ordizia salió mejor plantado en el verde, y la competición por ver quién conseguía transformar más golpes de castigo continuó. Lander Mujika puso el empate a 9, aunque una buena acción defensiva le permitió a los burgaleses lograr un nuevo golpe de castigo y volver a adelantarse en el marcador (12-9).

El equipo vasco rompió el partido con el primer ensayo de la mañana logrado por Alain Araña(12-14) que convirtió, como no podía ser de otra forma, Lander Mujika (12-16). Aguantó el Recoletas que no quería entrega la victoria a los vascos. De esta forma, tras una touch, los burgaleses avanzaron hasta la línea de marca para lograr el ensayo y darle de nuevo la vuelta al electrónico. Javier Alonso puso el 17-16, mientras que Tomás Carrió transformó el tiro al palos una vez más (19-16).

Los minutos finales fueron un continuo ir y venir de los dos equipos. Un puntapié de castigo de Lander Mujika en el minuto 74 (19-19) equilibraba las fuerzas, pero tan solo cuatro minutos después la maestría de Carrió parecía que iba a dar el triunfo a los locales (22-20).

Sin embargo se equivocaron los burgaleses en los últimos compases del encuentro, cuando la ansiedad por conseguir la victoria les hizo equivocarse en algunas tomas de decisiones. Como la de permitir un golpe de castigo muy sencillo para el Ordizia con el tiempo cumplido. El árbitro interpretó el que el placador castellano no había liberado el balón y sancionó la jugada. La posición era inmejorable para un jugador como Mujika, que llevaba todo el encuentro demostrando lo que era capaz de hacer con su puntapié. Y en esta última jugada no falló, logró la transformación y poner el empate en el electrónico (22-22).

De esta forma, el Recoletas Burgos Universidad de Burgos tendrá que confirmar su presencia en el play off en la última jornada de la fase regular que le enfrentará al Barça Rugbi.

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