Recoletas Burgos Caja Rural pierde ante el VRAC a la espera de los cuartos de final por el título

Recoletas Burgos Caja Rural se vino de vacío de Valladolid en el partido más desigual de las dos últimas temporadas ante el líder VRAC Quesos Entrepinares. Recoletas estuvo muy desordenado todo el partido y los locales, presionando lo justo, se llevaron la victoria por 45-10.

El duelo entre VRAC Quesos Entrepinares y Recoletas Burgos Caja Rural, con permiso de El Salvador, es el mejor partido que se puede ver en Castilla y León y en España en estos momentos. Es el 'clásico' del rugby nacional en los últimos años, siempre tremendamente igualado y que en dos ocasiones se ha decantado del lado burgalés: la Copa del Rey y la Supercopa, ambas en 2024. pero en esta ocasión los locales fueron muy superiores.

El partido del Pepe Rojo no tenía trascendencia en la clasificación, VRAC ya era matemáticamente primero en la tabla y Burgos, segundo. Los vallisoletanos con 63 puntos y dos derrotas superaban a los burgaleses, con tres derrotas y 56 puntos. Aun sin consecuencias en la clasificación, Recoletas llegaba a Valladolid con la intención de consolidar su prestigio y a volver a Burgos con un triunfo.

EL VRAC llegaba eufórico al partido tras haber conseguido de nuevo la Copa Ibérica, al ganar en Valladolid la semana pasada a Os Belenenses de Lisboa por 43 a 39, tras una prórroga; y con la vista en la final de Copa ante sus vecinos de El Salvador, el 24 de mayo en el Estadio José Zorrilla. Enfrente estaba Recoletas Burgos Caja Rural, en su mejor momento de la temporada, que llegaba a Pucela con las bajas de Nicolas Moleti, Pablo Rascón y Bernardo Vázquez y los amonestados Vicente Boronat y Tomás Domínguez. Con esas bajas, José García alineó a varios sub23 en esta ocasión. tampoco estaban los veteranos Tani Bay, Iñaki Mateu o Urko Zumeta.

Recoletas empezó el partido con muchísima fuerza el partido acorralando al VRAC con potencia y provocando que la defensa vallisoletana se empleara a fondo para evitar la marca de los gualdinegros. En el minuto 7, el Quesos Entrepinares evitó el ensayo de Recoletas, pero fue un espejismo.

Burgos no dejaba jugar al VRAC que se mostró incómodo por el empuje burgalés. Solo los errores provocados por los locales hacían que Recoletas sufriera algo, aunque lejos de la 22. Y fue VRAC el primero en golpear en el minuto 17 con un golpe de castigo de Sam Hollingsworth.

Los primeros puntos les sentaron mejor a los locales que a los burgaleses y fueron los minutos más intensos del partido. Y eso que los gualdinegros intentaron jugar más a la mano y en campo rival. Pero sin lograr sacar partido de las melés que tuvieron a favor en el primer tiempo. En el intento de jugar a la mano, Recoletas cometió varios adelantados que le hacían perder la posesión del oval.

A lo largo de toda la primera parte hubo mucho juego en el centro del campo por el respeto entre los dos XV. El calor también se hacía sentir sobre el verde del Pepe Rojo, lo que se traducía en un juego sin ritmo con las continuas peticiones del árbitro Eki Fanlo para que los dos equipos se afanaran en dar continuidad al juego.

A los 25 minutos Guillo pidió tiro a palos tras una infracción vallisoletana. El lanzamiento, un tanto escorado y lejano, se convirtió en el empate. Pero Valladolid estaba mejor en el campo y aprovechaba los errores de Burgos como una touche mal ejecutada que permitió a Mateos correr tras una patada de la defensa del VRAC y llegar a la línea de marca libre para ensayar. Hollingsworth lo ratificó con su transformación, poniendo el 10-3 en el luminoso de Pepe Rojo.

El segundo ensayo de VRAC llegó tras el empuje de maul tras una touche. Miejimolle toco línea de marca para hacer sus puntos en el minuto 37 para que Hollingsworth volviera a transformar y poner el 17-3 en contra de Recoletas.

El segundo tiempo empezó de la misma manera que terminó el primero. VRAC, mucho más centrado, logró otros dos ensayos más por medio de Pablo Mateos y de Perotti con sus respectivas transformaciones de Hollingsworth. El marcador era casi insalvable, más que nada por el empuje de los locales.

Recoletas recortó la distancia con un ensayo de Iker Aduriz refrendado por la transformación de Guillo Mateu. Con el 31-10 y el carrusel de cambios volvió a sentar mejor a los locales que se mostraron muy superiores en todas las facetas del juego. Gabriel Vélez volvió a ensayar para el VRAC abriendo una brecha muy grande (38-10) ya cuando apenas quedaban 13 minutos para el final y con Recoletas con un hombre menos por la tarjeta amarilla a Tórtola.

El ensayo de Álex Saleta en el minuto 74 y la transformación de Hollingsworth dejaba un marcador muy desequilibrado 45-10 en el partido más gris de Recoletas Burgos Caja Rural.

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