Guardia Civil y Policía escoltan 64 caravanas de camiones en Burgos desde que comenzó el paro del sector

A pesar de las negociaciones abiertas por parte del Gobierno con la gran patronal del sector, los paros convocados por la La Plataforma en Defensa del Sector de Transporte continúan. Y ya van nueve días consecutivos, en los que las diferentes movilizaciones desarrolladas a lo largo y ancho del país están generando un sinfín de problemas de abastecimiento a empresas y consumidores.

En este sentido, las fuerzas de seguridad han escoltado 64 caravanas de camiones en la provincia de Burgos desde que comenzaron los paros. La mayoría de esas escoltas han sido desarrolladas por la Guardia Civil (54), mientras que el resto han sido desarrolladas por unidades de la Policía Nacional. En todos los casos, las intervenciones se han realizado a requerimiento de las propias empresas que no secundaban los paros para garantizar su seguridad de movimientos.

En el conjunto del territorio nacional se han escoltado ya 4.519 caravanas de camiones, se ha detenido a 54 personas y se ha denunciado a 399 transportistas por incumplir alguna normativa.

Según explican desde la Subdelegación del Gobierno, las solicitudes de escolta se han ido incrementando a medida que pasaban los días. Así lo corroboran desde la patronal burgalesa, cuyos responsables insisten en la necesidad de garantizar el derecho a no participar en los paros si no se está de acuerdo con los mismos.

Eso sí, por el momento, los paros no han provocado incidentes graves en Burgos. De acuerdo a la información facilitada por la Subdelegación, hasta el momento no se han registrado problemas de orden público en piquetes o centros de trabajo, como sí se han registrado en otros puntos del territorio nacional. Tampoco se han registrado hasta el momento grandes problemas de circulación. Si bien es cierto que en los últimos días se han desarrollado varias 'marchas lentas' por las carreteras de la provincia, su impacto ha sido menor que en otros puntos de España.

No obstante, y a pesar de todo ello, los paros en el sector están generando muchos problemas de abastecimiento a empresas y consumidores. De hecho, varias firmas burgalesas se han visto obligadas a modificar o incluso paralizar puntualmente su producción ante la falta de suministros o la imposibilidad de mover el stock de sus almacenes. La mayoría están echando mano de momento de medidas de flexibilidad laboral interna, pero en algunos casos ya se está poniendo sobre la mesa la posibilidad de acudir a la figura del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para reducir el impacto de la parada de producción. Si la situación continúa, se prevé la presentación de numerosos expedientes.

Paralelamente, los supermercados de la provincia han tenido ya problemas puntuales de desabastecimiento de algunos productos muy concretos. Así, en algunos lineales se observa déficit de leche, aceite, pasta o pescados, aunque la patronal del sector llama a la calma. Mención aparte se merecen, en este ámbito, las pescaderías, que están sufriendo la situación en carnes propias, ya que algunas flotas pesqueras permanecen amarradas en puerto.

Y mientras tanto, el conflicto se enquista. A pesar de las negociaciones abiertas por parte del Gobierno y a la toma de varias medidas en las últimas horas, los convocantes de los paros continúan en pie de guerra y van camino de las dos semanas de protestas.

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