El abandono de animales en Burgos no disminuye, se sustituye por intentar darlos en adopción
Las protectoras de la provincia de Burgos constatan este comportamiento. Reconocen que el verano es una época «dura» por la reducción de casas de acogida y el aumento de la gente que acude a ellos para dar en adopción a su mascota
Manel González Cortijo
Lunes, 28 de agosto 2023, 07:29
Las protectoras de animales de la provincia de Burgos están dejando atrás el último verano antes de que entre en vigor la nueva Ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales. La ley, conocida como ley de bienestar animal, entrará en vigor el día 29 de septiembre con la finalidad de aumentar la protección de los derechos fundamentales de los animales, tanto de compañía, como determinados animales silvestres en cautividad o colonias felinas.
Aunque la ley no ha entrado en vigor, las campañas de concienciación para evitar el abandono de animales en las épocas de vacaciones han sido constantes en nuestro país. Las protectoras de la provincia de Burgos apuntan que se ha reducido el abandono de animales, pero esta no es una buena noticia tampoco. Se ha reducido el abandono de animales al mismo tiempo que han aumentado las personas que quieren dar a su mascota en adopción, sobre todo perros.
Es decir, el abandono de animales no ha disminuido, solo que ahora se recurre a las protectoras, en lugar de dejar al animal tirado por el campo o caminos. Pero este comportamiento, como señalan desde las protectoras, es pasar la responsabilidad a otra persona, arrebatar al animal del que ha sido su hogar.
Nueva Ley de Protección Animal
Burgos es una provincia con gran variedad de fauna por lo que se verá afectada por esta ley. Aunque quedarán excluidos los animales utilizados en espectáculos taurino, animales de producción, de experimentación científica, perros de caza (aunque al principio no se encontraban excluidos), de ganado o labores de protección civil entre otros.
Los aspectos fundamentales de la ley que afectarán a la cotidianidad son, sobre todo, la supervisión del animal, que no se podrá quedar más de tres días consecutivos sin compañía. En el caso de los perros el plazo no se podrán superar las 24 horas. También quedan prohibidas las herramientas que puedan causar lesiones como los collares eléctricos, de impulsos, de castigo o ahogo.
El sacrificio de un animal de compañía esta condenado con multa de entre 50.000 y 200.000 euros, excepto en casos extremos por el estado del animal o alguna enfermedad contagiosa que pueda propagar. Aun así, se establece la prohibición de sacrificar animales de compañía, salvo por motivos de seguridad de las personas o animales o de existencia de riesgo para la salud pública debidamente justificado por la autoridad competente.
El verano siempre es difícil
Las protectoras de la provincia coinciden al señalar que el verano es una «época dura y de mucho trabajo» para estos centros. Con las vacaciones se disminuyen las casas de acogida y aumentan los abandonos o el deseo de dar al animal en adopción. La mayoría de protectoras de Burgos no cuentan con un recinto, funcionan mediante casas de acogida. Así, son voluntarios los que acogen al perro o gato en casa mientras encuentra un hogar definitivo.
Las protectoras burgalesas se encargan de acoger a una gran cantidad de animales en la época estival. Desde MAPA, en Miranda de Ebro, cuentan con cuatro casas de los voluntarios fijos, mientras que muchas veces, los nuevos voluntarios acaban acogiendo al animal recibido y se quedan sin espacio para seguir ayudando a la protectora.
En España son comunes los abandonos de perros y gatos la Fundación Affinity contabiliza unos 288.000 por año, concentrándose sobre todo en verano. Las protectoras se mantienen expectantes hasta comprobar cómo funcionará la nueva Ley de protección animal.
Las recomendaciones
Las recomendaciones de cada de verano son las mismas, aunque año a año vemos como las temperaturas complican aun más la salud de los animales. «No debemos darles otro trato que no sea el que necesitan las personas durante los bochornosos días de verano, al fin y al cabo, somos muy parecidos», señalan desde una protectora burgalesa.
Se recomienda, no dar paseos en el medio día de 12:30 a 17:30 horas como mínimo. Aunque puede extenderse el horario restrictivo con las olas de calor. Hay que mantener a nuestras mascotas siempre bien hidratadas, tenerlas a la sombra, en lugares ventilados y suelo fresco a poder ser. En ningún caso hay que dejar que estén a la luz directa de sol durante las horas de calor, sobre todo si el animal es oscuro.
Los perros, por ejemplo, no sudan corporalmente, por lo que no tienen un sistema de regulación de temperatura igual al nuestro. Con las razas de perro que no están adaptadas a estás canículas del verano hay que tener mucho cuidado por el riesgo de morir se eleva y sus cuidados deben ser especiales en estos casos.
