Los agricultores del Arlanza, pendientes de la valoración de daños de la última granizada

La granizada que el pasado viernes cayó por la zona de Tordómar, Villangómez y la comarca del Arlanza en la provincia de Burgos ha afectado al cultivo pero todavía no se han podido estimar los daños. Así lo explica Gabriel Delgado, secretario general de UPA en la provincia de Burgos. «No se ha podido hacer valoración pero los agricultores están pendientes de los peritos», explica Delgado quien añade que «sí hay daño, por lo que me han comentado compañeros, pero no se puede asegurar cuánto».

Los agricultores de la zona del Arlanza vieron como el viernes pasado una granizada cayó sobre sus cultivos. Las consecuencias en pueblos como Tordómar se podían apreciar incluso el sábado cuando el granizado se acumulaba en algunas calles. Ahora están pendientes de la valoración de los peritos después de dar el parte con los daños.

El secretario general de UPA explica que la granizada ha afectado a los cultivos pero podría haber sido peor de haber llegado con el cultivo más avanzado. Es decir, a los campos con trigos y cebadas más tempranas ha causado más daño esta granizada. «En algunos lugares ha pillado al trigo con el tallo con zurrón (la última hoja antes de crecer la espiga) y es un momento en que es más delicado», apunta.

La zona del Arlanza es una comarca en la que el trigo y la cebada suelen ir más avanzadas que otras de la provincia burgalesa, explica Delgado, y estos contratiempos meteorológicos afectan más a los cultivos prematuros.

Delgado explica que el tiempo actual está acompañando la cosecha pero sería deseable que la lluvia no llegase de golpe si no diluida en el tiempo, «mucha agua también conlleva enfermedades», apunta Delgado. «Hacía tiempo que no teníamos un abril y un mayo tan lluviosos y eso es bueno, ahora necesitamos temperaturas suaves, de lo contrario tenemos riesgo de más granizadas», explica el secretario general de UPA.

Delgado señala que la pandemia de la covid-19 está afectando, «mucho a la agricultura. Ahora el precio del cereal ha bajado mucho. Estamos consumiendo más producto interno pero necesitamos que este valga el precio que tiene y es al contrario, estamos vendiendo, de nuevo, por debajo del coste de producción. Todo es una cadena y, al final, al sector primario le afecta que la hostelería haya bajado», señala el secretario general de UPA.

Delgado explica que los productos que no se han vendido a hostelería se han retirado pero a precios «ridículos». El secretario general de UPA señala que «no es justo olvidarse del sector agrario que ha estado a la altura durante todo este tiempo».