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Félix Rodríguez de la Fuente con lobos.
Rodríguez de la Fuente creía en la caza para equilibrar los ecosistemas

Rodríguez de la Fuente creía en la caza para equilibrar los ecosistemas

Benigno Varillas, biógrafo del naturalista, recoge esta reflexión en su libro 'Matar lo libre', presentado en Poza de la Sal

Jueves, 4 de julio 2019, 19:01

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El naturalista Félix Rodríguez de la Fuente creía que la caza debía recuperar su esencia ancestral en el equilibrio de las especies y para el sustento humano, en lugar de ser una simple actividad lúdica, si quiere ser aceptada en el futuro por el conjunto de la sociedad.

Este es el mensaje que transmite 'Matar lo libre', de Benigno Varillas, autor biógrafo de Félix Rodríguez de la Fuente, sobre el pensamiento del naturalista en torno al controvertido tema de la caza, en la presentación de su obra en Poza de la Sal, localidad natal de Rodríguez de la Fuente, como recoge EFE.

El libro hace una llamada a reinventar la actividad cinegética para que sea asumida mayoritariamente por una sociedad cada vez más contraria a que los animales salvajes se maten por deporte o diversión.

«Aunque la sociedad sea cada vez más vegana –ha afirmado Varillas a los periodistas antes de presentar su nueva obra- no se podría llegar a prohibir totalmente la caza sin dañar el equilibrio ecológico».

La obra de Benigno Varillas analiza, con referencias a Félix Rodríguez de la Fuente y a Ortega y Gasset, la importancia del concepto biológico de la depredación en la evolución de los seres vivos que, con la domesticación, pasaron a considerar la caza como divertimento.

En opinión del escritor, es «una simpleza» considerar la caza una diversión cuando «sin depredación no se habría producido la evolución». Benigno Varillas defiende la caza como «instrumento para la selección natural» de las especies, además de facilitar un alimento de alta calidad.

Sin embargo, insiste en que no es lo mismo cazar, «que es algo noble y serio y forma parte de la selección natural», que matar la mejor pieza, porque cuando un cazador actúa al margen de la esencia busca la pieza más llamativa, que «muchas veces es precisamente la destinada a procrear y mejorar la especie».

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