De Burgos a Silicon Valley gracias a la resistencia de las bacterias

Esta referencia encendió las despiertas mentes de sus alumnos de biología y anatomía aplicada de 1º de bachillerato, que reclamaron su oportunidad. En 2019, antes de que el coronavirus llegara a nuestras vidas, Belén propuso a sus alumnos participar en el concurso que Educaixa ofrecía a centros y alumnos para competir en 'The Challenge'. Belén y sus alumnos participaron en la modalidad 'Stem', que consiste en aplicar el método científico en el aula (las otras modalidades son Big Data, Reto Emprende y Be Critical). En 2019 fueron seleccionados, viajaron a Barcelona, ganaron y fueron a Boston. Ese viaje quedó en la retina de los alumnos del colegio.

En 2020 Belén y sus alumnos volvieron a presentarse y volvieron a ser seleccionados. Si la pandemia no hubiera estallado habrían vuelto a viajar hasta Barcelona para defender su trabajo. Pero el coronavirus lo paralizó todo y la defensa se hizo de manera online. Con este paisaje, en 2021 decidieron no participar.

Pero en 2022, mientras Belén daba clase con el proyector, la carpeta de los recuerdos del viaje a Boston apareció en la pantalla mientras explicaba a sus alumnos. Y comenzó el runrún. «Fueron los alumnos los que me preguntaron que si no les iba a presentar», explica Belén. «Les enseñé fotos del MIT, de la Universidad Harvard, pero me miraron con cara de '¿y nosotros, qué?'. Presentar estos proyectos es salirte del aula, trabajar mucho en casa, ir a la universidad a investigar... Implica muchísimo y se lo dije, pero no pude disuadirles y buscamos la convocatoria, estaba abierta y empezamos a prepararlo», recuerda Belén.

Era el mes de enero y tenían apenas tres meses para trabajar a contrarreloj toda la clase en busca de proyectos que pudiera llevarles de nuevo hasta Barcelona a la gran final del 'The Challenge 2022'. «Se dividieron en seis equipos y llegamos a un acuerdo, yo les dejaba dos horas de mis asignaturas y ellos trabajaban otras dos horas en casa, aunque en realidad han empleado muchas más horas fuera del aula. El tema fue libre, tenía que ser uno en el que se pudiera aplicar el método científico, y cada grupo eligió su tema y se dividió el trabajo», indica Belén.

Con los temas elegidos los grupos se pusieron a trabajar. «Los seis proyectos se movieron muchísimo, fueron a la universidad, contactaron con profesionales sanitarios. Fue una maravilla. Agotador, pero una maravilla», rememora orgullosa su profesora.

De los seis proyectos tres fueron seleccionados para la final de Barcelona. «La estancia de cinco días en la Ciudad Condal sirvió para mejorar los proyectos y asistir a charlas con 'educouch' e investigadores que nos han ayudado mucho», incide la docente. Y como ya ocurriera en el 2019, de los tres proyectos presentados uno fue seleccionado junto a los mejores.

No fue sencillo, en total compitieron 1.252 propuestas, de las que 100 llegaron hasta la final de Barcelona. Allí, cinco trabajos por modalidad se proclamaron ganadores. Paula Elena Poiata, Beatriz Teruel, Ana Merino y Carla Pinillos, con su proyecto '¿Estamos preparados?' lograron los billetes para Silicon Valley.

En '¿Estamos preparados?' estas cuatro alumnas de Madres Concepcionistas han investigado las superbacterias y la única forma que existe para combatirlas: el cambio de mentalidad de la sociedad mediante la prevención y la educación, informando en las aulas y en la principal fuente de conocimientos del siglo XXI, las redes sociales, para evitar la que puede ser la próxima pandemia que pondrá en jaque al planeta

«Su proyecto se basa en cómo llevamos muchos años pasándonos con los antibióticos, incluso tomándolos cuando no están indicados porque nos automedicamos y, de esa forma, las bacterias se hacen resistentes a los antibióticos. Empezaron a investigar, fueron a la Universidad de Burgos, estuvieron con Diego Serrano, que es el director del Plan Nacional de Resistencia a los Antibióticos (PRAN) en Burgos, han hecho encuestas por todo el colegio a padres y alumnos, han escuchado podcast, han dado charlas en las diferentes clases del centro... Y en Barcelona hicieron una exposición brillante. En tres minutos hablaron las cuatro y la sensación cuando acabaron es que lo habían hecho muy bien y que teníamos que preparar las maletas», asegura Belén con orgullo.

Y así será. Para preparar las maletas para el viaje a Silicon Valley todavía queda algunas semanas en las que Paula Elena, Beatriz, Ana y Carla deberán hincar los codos para terminar bien el curso, pero cuando lleguen las vacaciones escolares, y a pesar de que se perderán los Sampedros, cumplirán el sueño de todos los compañeros de clase cuando vieron por casualidad la carpeta de su profesora de Biología que recordaba que en 2019 sus compañeros también fueron los mejores.