El famoso restaurante del centro de Burgos que echa el cierre

Uno de los bares más famosos de Burgos ha echado el cierre. Se trata de La Cabaña Arandina, famosa por sus bravas y sus raciones. Ahora, el local está siendo reformado.

Situado en la calle Sombrerería, número 12, La Cabaña Arandina abrió sus puertas en 1955. Tras su jubilación en 2007, los actuales dueños cogían las riendas de este céntrico local, famoso por sus patatas bravas, calamares y demás pinchos y raciones.

Por la barra y las mesas de La Cabaña Arandina han pasado miles de burgaleses y visitantes. Personas que se juntaban y apretaban alrededor de las mesas para compartir, sobre todo, una ración de bravas, bien fuera simple o doble.

En sus 17 años de reciente historia, La Cabaña Arandina ha congregado a miles de personas de Burgos, que llenaban sus mesas en invierno, y de visitantes, que en verano suponían hasta «el 80%» de su clientela.

Ahora, la jubilación ha llamado a la puerta y el local hostelero La Cabaña Arandina ha echado el cierre, apagando el reloj-termómetro que adornaba su fachada. Con un «cerrado permanentemente» que aparece al buscar el bar en Google, así como con la puerta cerrada y las ventanas cubiertas por papel.

Poco se aprecia de su interior desde la calle Sombrerería, aunque el local del número 12 está siendo reformado. Su clásica lámpara sigue colgando del techo, pero los recuerdos en forma de cuadros en sus paredes ya han desaparecido.

Uno de los platos que define a Burgos y, sobre todo, a la calle Sombrerería, son las patatas bravas. En La Cabaña Arandina también se preparaba este plato, un manjar para muchos, elaborado «con tiempo y mimo».

En cuanto a sus ingredientes, Mari Sol, una de las dueñas, comentaba a Burgosconecta que las patatas provenían de la provincia de Burgos. Además, la salsa contenía ingredientes de la huerta como pimiento, cebolla y tomates, aunque destacaba que la preparación es la clave.

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