La crisis médica deja en casa a la mitad de la fuerza laboral de Castilla y Léon
Medio millón de personas dejan de acudir a sus empresas. Otras 300.000 sufren un ERTE o teletrabajan
La situación de emergencia laboral que está provocando la crisis sanitaria ha provocado ya «el triple de Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) que en toda la crisis de 2008», aseguró el secretario general de CCOO en Castilla y León, Vicente Andrés. El «tsunami» de esos cierres urgentes de la producción afectan hoy ya a 3.335 empresas y los sufren 34.722 trabajadores. En apenas una semana de estado de alarma gubernamental, las dos grandes centrales sindicales calculan que 300.000 trabajadores de la región están sometidos a ERTE o teletrabajan en sus casas. Solo están pudiendo acudir a sus centros de trabajo unos 450.000, es decir casi la mitad de la fuerza laboral total (que ronda el millón de personas en toda Castilla y León).
«Por supuesto que va a haber una recesión. En cuanto acabe la pandemia de salud. La pregunta es si se afronta de forma colectiva o vuelven a pagar el pato los trabajadores como ocurrió en 2008», reclamó el máximo responsable de UGT Castilla y León, Faustino Temprano. Ambos analizaron hoy por videoconferencia la situación laboral que se vive en el empleo de la comunidad.
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Los líderes sindicales sitúan en la gestión empresarial una de las claves para evitar el «colapso total» de la economía, algo que «llevaría décadas de recuperación», advirtió Andrés. Para ello, desde UGT y CCOO reclaman que se combine el «respeto estricto de las normas sanitarias y de seguridad» con la «protección del empleo». «Se pueden mantener abiertos muchos centros si se toman las medidas de prevención -dijo Vicente Andrés-. Hay que intentar que la pandemia médica no vaya acompañada de la laboral«.
Los sindicatos mayoritarios continúan hoy las negociaciones con la Junta de Castilla y León para establecer medidas complementarias de apoyo en la región. «Faltan medidas concretas para evitar más despidos, aumentar la moratoria en los alquileres, reforzar los contratos temporales y reforzar la ayuda a los trabajadores domiciliarios», resumió Temprano.
Asimismo, los sindicatos de la región recordaron que estos ERTE 'exprés' que permite la nueva ley no son negociados con los trabajadores sino simplemente «comunicados» a la Administración, a la que animaron a «estar vigilante» para evitar «aprovechamientos para echar a trabajadores». UGT y CCOO insistieron en que sus sedes siguen operativas en toda la región y brindaron sus servicios a aquellos trabajadores que no tengan representación laboral en sus empresas.