«Cuando la portería para nos convertimos en un equipo muy difícil de superar»
El técnico del Villa de Aranda, Alberto Suárez, se deshizo en elogios hacia sus pupilos tras el importante triunfo conseguido en tierras alcarreñas
Emmanuel R. Fernández. ADG.
Guadalajara
Sábado, 17 de abril 2021, 20:54
El técnico del Villa de Aranda, Alberto Suárez, se deshizo en elogios hacia sus pupilos tras el importante triunfo conseguido en tierras alcarreñas: «Hicimos un partidazo, y nos lo merecíamos. Hace tiempo que no miramos la clasificación. Lo único que queremos es que el trabajo dé sus frutos, ser felices y que el equipo se agarre. Este grupo es una pasada. Tienen ilusión y ganas pese a estar como estamos. Nos alegramos especialmente por nuestra gente, que sigue ahí apoyando».
La actuación de Luis de Vega bajo los palos resultó fundamental para lograr la victoria: «A Luis le estaba costando mucho la temporada. Venía de hacer solo tres paradas el sábado pasado. El portero es fundamental en el balonmano. En defensa somos muy buenos, y cuando la meta para nos convertimos en un equipo muy difícil de superar. Ahí están los resultados: perdemos, pero por poquito». El entrenador asturiano, además, valoró la difícil situación de un Quabit Guadalajara que estrenó preparador: «Es un equipo muy joven. Hay que tener paciencia y entender que la Liga ASOBAL, esta temporada, es la más rara y dura de nuestra historia por diferentes razones. Además, está empezando a haber resultados no previstos. Me gusta mucho la plantilla del Quabit».
Por su parte, Rodrigo Reñones se estrenó con derrota como entrenador del Quabit Guadalajara, que destituyó a Mariano Ortega tras el tropiezo ante el Recoletas Atlético Valladolid. «En el inicio el equipo estuvo muy bien, hizo lo que reclamamos desde el cuerpo técnico: intensidad defensiva y correr el contraataque. A medida que fue avanzando el partido, Villa de Aranda se asentó y no fuimos capaces de encontrar soluciones. La primera línea rival es muy explosiva. Fuimos perdiendo confianza, y su defensa avanzada en la segunda parte nos hizo daño. No tuvimos la velocidad que deberíamos», dijo el técnico cántabro, centrado en reactivar a sus jugadores para lograr la permanencia: «Desde el primer día, el objetivo es que los chicos, que a lo largo de la temporada rindieron a buen nivel, recuperen la confianza en sí mismos y con el resto de compañeros. No nos lo podemos permitir».