Decepción por la valoración de puestos de las trabajadoras sociales, que confían en la negociación

Cinco meses han pasado desde que el equipo de Gobierno consiguiera frenar in extremis la convocatoria de huelga anunciada por las trabajadoras sociales del Ayuntamiento de Burgos. Las ediles de Personal y Servicios Sociales asumieron una serie de compromisos, a partir de las demandas del colectivo profesional, y si bien se han conseguido avances, la negociación no está cerrada.

«Estamos contentos por lo conseguido pero decepcionados por otras cosas», admite Luis Delgado, portavoz de las trabajadoras sociales. Tras mucho pelearlo, el colectivo ha conseguido que se haga una valoración de sus puestos de trabajo, pues han ido asumiendo más funciones y competencias, que no están reconocidas ni en sus plazas ni en sus salarios.

La valoración ya está hecha, pero «no nos gustan algunos aspectos que contempla», admite Delgado, pues no se ajustan a sus demandas. Así que están a la espera de la posible negociación que realicen los sindicatos. «Estamos a la expectativa», pendientes de cómo evolucionan las reuniones para la modificación de la Relación de Puestos de Trabajo, que afecta a todo el Ayuntamiento.

Las trabajadoras sociales están satisfechas porque han conseguido que se cubran las 8 plazas que estaban vacantes. Tres saldrán en la Oferta Pública de Empleo que, según el área de Personal, se publicará en octubre. Las otras se cubrirán por estabilización. Aquí también toca esperar a ver si se materializa el compromiso, insiste Luis Delgado.

Y, en estos meses, sí que se ha avanzado en la cobertura de plazas ante bajas. «Estamos bien, pero el problema son las auxiliares administrativas». Ahí, pese a la existencia de una bolsa de empleo, el Ayuntamiento tiene un gran problema y, en el caso de los Servicios Sociales, está suponiendo un bloqueo de los expedientes de las ayudas de urgente necesidad y ayuda a domicilio.

Llevan con este problema tres meses y «no podemos estar así hasta diciembre», afirma Delgado. Eso sí, esta situación debe resolverse a nivel de todo el Ayuntamiento, de ahí la importancia también de la nueva RPT. Por todo ello, los trabajadores sociales, aunque están satisfechos por algunos logros, afirman que «la negociación no está cerrada».

Tampoco tienen intención de volver a movilizarse, al menos de momento. Confían en los sindicatos, que están metiendo presión, «hartos» de las promesas incumplidas del equipo de Gobierno. Y si los sindicatos se movilizan, o protestan, como han anunciado, las trabajadoras sociales se sumarán. Sobre todo ahora que se han dado cuenta de que pueden, y deben, hacerlo.

Luis Delgado admite que, como profesionales y trabajadores, han aprendido mucho de la movilización realizada estos últimos meses. «Hemos sido conscientes del poder que tenemos, de que tenemos poder de negociación», afirma, pues muchas de las trabajadoras sociales nunca habían participado de una movilización laboral, ni habían hecho protestas.

Además, Delgado asegura que con sus demandas se han «revuelto las aguas» en el Ayuntamiento, retomándose viejas reivindicaciones, como la de realizar una valoración de puestos para todo el Consistorio. Es necesario, también lo aseguran así los sindicatos, y entre las protestas de trabajadores sociales y la negociación del convenio de Policía Local, se ha vuelto a poner sobre la mesa.

Todas las noticias de Bugos en BURGOSconecta.

• Temas
• Funcionarios
• Huelgas
• Servicios públicos