Las diez áreas de esparcimiento canino de Burgos estarán operativas en poco más de dos meses

La semana pasada un grupo de vecinos de Burgos registró en el Ayuntamiento de la ciudad una documento con 764 firmas en el que pedían que se habilitasen zonas de esparcimiento canino. Un proyecto que cuenta con partida presupuestaria desde mayo de 2021 y que se adjudicó antes de acabar el año anterior.

Como ha respondido el Consistorio a estos vecinos, el Ayuntamiento está trabajando para que estas áreas, que facilitan el correcto desarrollo de las mascotas y contribuyen al bienestar de sus dueños, sean una realidad cuanto antes. «Hay compromiso por parte del equipo de Gobierno. En el PSOE llevábamos la creación de estos espacios. Los presupuestos son los que son pero en cuanto hemos tenido oportunidad de meter esta partida lo hicimos y fue en la modificación presupuestaria de mayo de 2021», explica Josué Temiño, concejal de Juventud, Medio Ambiente, Sanidad y Aguas.

El Ayuntamiento destinará unos 99.000 euros para estas zonas proyectadas en espacios de titularidad municipal.

Temiño entiende la petición de los vecinos, «hay mucha necesidad porque la ciudad lleva muchos años sin ellas. Pero hay que entender que la administración pública tiene sus tiempos. Quiero transmitir tranquilidad porque se van a habilitar esas zonas para el disfrute de los ciudadanos y sus mascotas».

Así, Temiño asegura que en breves se firmará el acta de replanteo y, «en menos de dos meses, los ciudadanos tendrán sus áreas de esparcimiento canino». Los plazos que el Ayuntamiento se marca es que a finales del mes de febrero comiencen la intervención. «La empresa nos ha explicado que no es una intervención compleja», asegura Temiño, por lo que en un par de meses estos espacios serán una realidad. «Hemos ido a una velocidad bastante considerable dados los plazos de la administración. Ojalá en breve podamos estar presentando estas zonas», reconoce el concejal.

Por el momento, se ha ido dotando a estos espacios de bocas de riego para ir poniendo las fuentes de doble plato e ir avanzando en el trabajo. Los vecinos reconocen que «está genial que se instalen esas fuentes y esas áreas tan repartidas por la ciudad. Pero si nos pusieron en verano los bebederos ¿por qué desde entonces no ha habido ningún avance?», lamentaba la representante de este grupo de vecinos. «Los dueños y los perros necesitamos esto», aseguraba esta vecina.

Temiño asegura a los vecinos que el bienestar animal «es un compromiso de este equipo de Gobierno. Se ha sacado la recogida de animales del contrato de basuras, se han invertido casi 700.000 euros en las instalaciones de la perrera. Entendemos que la relación con las mascotas es fuerte y queremos el bienestar animal y de las personas que conviven con los perros. Por ello estamos volcados en este trabajo». Pero los plazos de la administración son los que son, «entiendo a los ciudadanos porque las zonas son una necesidad y Burgos llevaba demasiado sin ellas».

Hasta ahora solo hay una zona canina en Burgos, la de San Isidro, «pero está casi fuera de la ciudad. Poca gente puede acudir, es complicado y apenas hay luz por la noche», lamenta la representante de estos vecinos que han presentado las firmas.

Temiño explica que se ha reunido con técnicos y asociaciones de animales para conocer cómo deberían ser estos espacios. De los diez que hay proyectos para repartir por la ciudad, cuatro serán semiabiertos y, el resto, cerrados. Las zonas semiabiertas están más alejadas del núcleo urbano. Además, se dotará a estos espacios de papeleras, dispensador de bolsas, cartelería para explicar la normativa y, además, se intentarán instalar bancos y plantar árboles para garantizar la sombra. «Paciencia, son semanas», garantiza el concejal.

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