Burgos, cada vez más cerca de estrenar el centro de salud de García Lorca tras 20 años de espera
Es la previsión que tiene el consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, quien ha indicado que no más allá del 15 de noviembre espera que esté en funcionamiento con plena normalidad
Han tenido que pasar más de 20 años para que una de las reivindicaciones más importantes de la ciudad de Burgos, y del barrio de Capiscol y del G9, se haga realidad. Después de numerosos retrasos, problemas con las empresas adjudicatarias, la crisis económica de los primeros años de siglo XXI y una gestión mejorable por parte de la Administración regional, el Centro de Salud García Lorca verá la luz a mediados de noviembre.
El consejero de Sanidad de la junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, ha señalado que esta semana se «está probando la instalación del gas y las de fontanería». La semana que viene le tocará el turno a «las instalaciones eléctricas» y a otros elementos que conforman el nuevo inmueble de la carretera de Logroño. Este verano, por ejemplo, se tuvo que retirar la fachada recién colocada por un nuevo contratiempo.
Todas estas acciones son previas a «la recepción del acta y la entrega de la obra», que tendrá lugar «a finales de este mes de octubre». Una vez que la Consejería de Sanidad reciba la obra se va a «proceder con la mayor rapidez» a la instalación del mobiliario y del equipamiento para que se pueda abrir al público «no más allá del día 15 de noviembre», fecha en la que espera que esté funcionando «con plena normalidad».
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Adaptación de profesionales y pacientes
La idea que tiene la Consejería de Sanidad de la Junta es que se ponga en marcha el plan de contingencia «una vez esté completado el centro de la carretera de Logroño». Mientras tanto, se seguirá usando el primitivo local de la calle Federico García Lorca número 23. Este local se cerrará al público cuando se haya terminado el de la carretera de Logroño y se lleven los servicios desde el G9 hasta Capiscol.
Esta apertura en el barrio de Burgos de Capiscol va a dar lugar a «procesos de adaptación de los profesionales y de los pacientes» a la nueva instalación. Vázquez ha pedido «paciencia porque los primeros días es posible que el funcionamiento de este servicio sea lento» pero, sin embargo, el beneficio va a superar con mucho a la posible ralentización de algunas consultas.
La actividad no se va a suspender en ningún momento y el paso de un centro a otro será consecutivo. Es decir, se dará servicio en la calle Federico García Lorca hasta el último día y el día siguiente se abrirá el de carretera de Logroño.