El Mirandés cumple su parte del plan, pero tendrá que jugar el playoff contra el Racing

El Mirandés inició la jornada en la cuarta plaza y en ella finalizó la liga al no fallar ni Elche ni Oviedo. De poco sirvió una intrascendente victoria ante el ya descendido Cartagena. El conjunto de Alessio Lisci, que desaprovechó la semana pasada la opción de depender de sí mismo, deberá superar en una eliminatoria a doble partido al Racing de Santander si quiere seguir soñando con el ascenso.

Mientras desde Riazor llegaba la noticia del primer gol del Elche, el cuadro jabato estuvo cerca de adelantarse en el marcador en un remate de Panichelli que salió algo cruzado. Tampoco alcanzó su objetivo el intento de Joel Roca. Cuando el partido enfilaba el ecuador del primer acto, el Cartagena dispuso de una doble ocasión para marcar. El remate de Millán, tras rozarlo Raúl, se estrelló en el travesaño y el rebote lo mandó alto Ortuño.

Volvió a amenazar el conjunto rojillo en un testarazo de Juan Gutiérrez, adelantándose en el primer poste, a la salida de un córner. Aunque el 0-3 del Elche en A Coruña impedía el ascenso directo del elenco de Alessio Lisci, el cuadro jabato trató de cumplir lo que estaba en su mano y se adelantó en el marcador, a los 38 minutos, en un remate raso y cruzado de Izeta a pase de Panichelli.

Sin embargo, justo antes de llegar al descanso, Millán, en boca de gol, se adelantó a Eguiluz y mandó a la red el centro desde la izquierda de Nacho. Pero la reacción del Mirandés fue inmediata y Joel Roca puso el 1-2 con un remate de volea para dar valor al balón aéreo ganado previamente por Panichelli en un envío de Víctor Parada desde el costado izquierdo. El disparo contó con la ayuda involuntaria de Martín, en quien tocó la pelota antes de superar a Jhafets.

Alessio Lisci decidió mover piezas para reservar a jugadores con riesgo de sanción de cara al playoff. Eguiluz y Panichelli fueron relevados por Julio Alonso, por lo que Víctor Parada pasó al centro de la defensa, y Butzke. No tardó el técnico romano en realizar un triple cambio y completó sus sustituciones antes de la hora de partido con la presencia de Carlo, Ander Martín y Álex Calvo por Reina, Gorrotxategi y Joel Roca pensando también en el descanso de jugadores decisivos de cara a las citas que se le avecinan a la escuadra jabata.

Millán pudo hacer el 2-2 al filo de la hora de juego, pero fue el Mirandés el que no perdonó. Butzke puso un balón de oro para Álex Calvo con muchos metros por delante. El futbolista cordobés encaró a Jhafets y estrenó su casillero goleador con la camiseta rojilla con un toque sutil ante la salida del meta del Cartagena.

El triunfo, quinto en las seis últimas jornadas, debe servir como estímulo para el elenco de Lisci, que jugará la eliminatoria ante el Racing con la ventaja de disputar el encuentro de vuelta en Anduva.

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