García-Page avisa de que no puede haber más consulta que la de la reforma estatutaria

El acuerdo entre el PSOE y ERC ha provocado este viernes la primera reacción critica de un barón socialista. En un comunicado, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha evitado cuestionar directamente lo pactado pero ha advertido que espera que no se produzca un trato de favor hacia la Generalitat de Cataluña y ha exigido ciertas garantías de que, como hoy mismo señaló el secretario de Organización de su partido, José Luis Ábalos, no se negociará el derecho de autodeterminación.

Page, uno de los dirigentes territoriales del PSOE más beligerantes con el independentismo, ha avisado en primer lugar de que «cualquier relación de bilateralidad que se quiera plantear tendrá que serlo con todas las comunidades autónomas por igual, y siempre desde la constancia de que el Gobierno de España representa al conjunto del país», pero además también ha reclamado que no se deje al Parlamento al margen de lo que eventualmente pueda discutirse en la mesa de diálogo que Pedro Sánchez ha aceptado crear entre el Gobierno y la Generalitat.

«Una vez más ha ratificado lo que siempre he defendido, lo que afecta al conjunto de España -remarca- debe ser objeto de valoración y votación de todas y de todos los españoles. No se pueden hacer consultas de territorios por separado, salvo las preceptivas reformas de Estatutos de Autonomía previa votación por las Cortes Generales».