Borrar
Imagen de los incendios de Cabuérniga. Foto: Javier Rosendo | Vídeo: Atlas

Medio centenar de incendios abrasan Cantabria

Revilla anima a denunciar «a los terroristas» que han provocado los fuegos, de los que 32 siguen activos

VIOLETA SANTIAGO

Santander

Lunes, 18 de febrero 2019, 09:57

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El lunes pasado fue el último día que Cantabria recibió alguna gota de lluvia. Esto, unido al viento sur y a unas temperaturas disparadas para la época del año (en Torrelavega se registraron casi 23º y en Santander al mediodía se pasaba de los 22º) provocó que toda la franja central de la región sufriera ayer abrasamiento y humo, con la detección de 50 incendios. La situación no llegó a la vivida en el periodo navideño de 2015 (cuando se registró otra gran oleada de quemas), pero la actividad para controlarlos fue frenética todo el día, con helicópteros e hidroaviones cruzando el territorio para cargar agua en la bahía, en cuyo entorno causaron gran expectación. Anoche seguían activos 48 incendios y se continuaba con los trabajos de extinción por tierra. La Administración temía que se complicara todo si el viento se intensificaba. La lucha fue difícil esta noche, pero a estas horas la cifra de fuegos activos ha bajado a 32.

SANE

La situación actual: 32 incendios activos

Según los datos facilitados por el director general de Medio Natural de Cantabria a las 7.30 horas, Cantabria sigue con 32 incendios activos, en 20 municipios. El más importante en extensión, aunque no afecta a población, está en una zona de monte de Esles, en el municipio de Santa María de Cayón.

Un total de 386 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, de Medio Natural, los bomberos del 112 de Cantabria y municipal, Protección Civil, Cruz Roja y Guardia Civil siguen trabajando en la extinción de esos fuegos, que por la noche ha complicado la situación en Cabuérniga, Ramales de la Victoria y la zona del Pisueña.

En Cabuérniga se han producido varios focos de gran extensión en los municipios de Los Tojos, donde en el pueblo de Saja se han acercado las llamas peligrosamente a las casas. También ha habido problemas en la zona de Valfría y Fresneda y el municipio de Bárcena Mayor, todos ellos en el valle de Cabuérniga.

Desde que el jueves se activó el operativo de lucha contra incendios en su máximo nivel (nivel 2) se han registrado 194 incendios forestales en Cantabria, según datos facilitados por el Gobierno regional en nota de prensa. La mayoría de esos incendios, según el Ejecutivo cántabro, son provocados y hasta ahora la Guardia Civil investiga a dos hombres, uno de 35 años de la zona de Cabuérniga -a quien pillaron in fraganti con un mechero- y otro de 39, en San Roque de Riomiera, como posibles autores de algún fuego, aunque ninguno de ellos ha sido detenido.

Vuelven a intervenir los medios aéreos: dos hidroaviones y un helicóptero Kamov del Ministerio de Agricultura, un helicóptero Cougar de la UME y el helicóptero del Gobierno de Cantabria.

Que ayer se presentaba una jornada movida se supo en cuanto amaneció: viendo la evolución de algunos siniestros en la noche del sábado y los efectivos con que contaba la Administración regional, el Gobierno declaró el nivel 2 del Plan Especial de Incendios Forestales de la comunidad (Infocant) y pidió ayuda al Ejército. A lo largo de toda la jornada, 226 integrantes de la Unidad Militar de Emergencias (UME) procedentes de León y de Zaragoza se fueron incorporando a varios puntos de la comunidad para reforzar las cuadrillas de la Dirección General del Medio Natural y a los voluntarios de Protección Civil. Hace poco más de tres semanas (el 24 de enero) Cantabria también recurrió al Ministerio de Defensa para hacer frente a otra emergencia: en aquella ocasión, por desbordamientos de ríos, inundaciones y argayos.

En total, hubo que movilizar a 760 personas. Uno de los sitios más calientes fue Cabuérniga, donde intervino un helicóptero Kamov del Ministerio y al menos 16 miembros de la UME con autobombas y un helicóptero Cougar. Otros puntos con problemas, Obeso (Rionansa) y Viaña (Vega de Pas) concentraron los esfuerzos de la Dirección General de Medio Natural y el helicóptero del 112 Cantabria. También el monte Caballar (en Santa María de Cayón) dio mucha faena. Finalmente, este incendio se controló por completo a última hora de la tarde. Solo Liébana y todo el sur (Campoo, Valderredible, Valdeolea...) se libraron de pasar por las brasas.

Alrededor de la mitad de los incendios se han registrado en las partes altas de los montes, de difícil acceso, por lo que las llamas no entrañaron riesgo directo para viviendas, poblaciones o infraestructuras. Tampoco hubo que lamentar daños personales, algo de lo que se congratuló el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, al tiempo que animó a los ciudadanos a denunciar a los causantes de los fuegos. Revilla denominó «terroristas ecológicos» a los pirómanos y, según aseguró, en muchos casos y áreas, la Guardia Civil «tiene sospechas de quienes son», ya que controlan a una treintena de personas por toda la región que esperan a que sople en viento sur para actuar.

«No se dan cuenta del grandísimo daño que causan al ecosistema de Cantabria. A lo mejor algunos lo hacen pensando que con eso mejoran los pastos, pero en un gran porcentaje se trata de gente que tiene la mente perturbada. Porque atacar el patrimonio público de forma tan coordinada en tantos lugares donde los accesos son complicados...». Revilla se felicitó, sin embargo, de que a uno ya se le había cogido 'in fraganti' y también de que está habiendo vecinos que están denunciando, «algo muy positivo, porque han visto a gente actuar de forma deliberada». El jefe del bipartito confió en que, con todos los medios que se pusieron a disposición se pudieran apagar todos los focos entre ayer y hoy, lunes. También agradeció los muchos apoyos ofrecidos por otras comunidades autonómas, «que aceptaremos en la medida que sean necesarios para acabar con esta situación terrible».

La UME fue recibida en dos puntos distintos: en Cabezón de la Sal y en La Lechera, en Torrelavega. Pablo Zuloaga, delegado del Gobierno, les dio la bienvenida. Está previsto que hoy, su Cougar empiece a volar a las 09.00 horas. Podrá realizar tres ciclos de vuelo de dos horas cada uno.

Además, se contó con 16 bomberos de Santander y Camargo, agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de Santander, Suances, Corrales, Ramales, Ampuerto, Valderredible, Rionansa y Polanco, que aportaron hasta 39 personas. En total, la Dirección General del Medio Natural reunió 260 trabajadores, el 112 Cantabria otros 51, Cruz Roja, 23 más; más efectivos del 061. La Guardia Civil añadió 36. Precisamente agentes de este cuerpo detuvieron a dos personas sospechosas de estar involucradas en los incendios. El primero, de 35 años, fue identificado en el monte Saja, en El Tojo, con las manos en la masa, justo después de provocar un fuego. Al segundo, de 38, le detuvieron en San Roque de Riomiera. El Gobierno cántabro explicó a media mañana que la situación era «muy complicada» (y eso que, en ese momento, se tenían registrados solo 33 fuegos) por las características del panorama: es más fácil controlar una gran quema que todos los que se estaban provocando por todo el territorio, se dolió el director general del Medio Rural, Antonio Lucio, al hacer uno de los balances del día en las instalaciones del 112, donde tiene su sede el Puesto de Mando Avanzado y el Centro de Coordinación Operativa. Desde éste, coordinaron los recursos Lucio y el director general de Protección Civil, Luis Sañudo.

«Los causantes son gente perturbada que no se da cuenta del daño que hace a Cantabria»

MIGUEL ÁNGEL REVILLA

Lucio tiene claro que quien prende «estos días» -pese a los avisos de alto riesgo que emite la Administración- busca «causar daño, porque quien quema sabe que es imposible controlar el fuego y que hay momentos en que ni con todos los medios del mundo» se pueden reducir. Para dar idea de la alevosía con que se están cometiendo, ejemplificó: en Mazcuerras, el viernes se encontraron mechas en 30 sitios distintos.

El tiempo no ayuda

Ayer, en el centro de coordinación se trabajaba con la previsión de tener que seguir empleándose a fondo durante el día de hoy, lunes, ya que la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) no pronostica lluvias hasta por la tarde. Los responsables de la lucha contra el fuego encaran el día de hoy con la esperanza de que al mediodía «entren nubes y llueva algo». Pero para el martes y el resto semana que viene no se esperan precipitaciones. «Si lloviera el alivio sería importante pero, de momento, creemos que el tiempo no nos va a ayudar».

Desde el jueves día 14, Cantabria ha hecho frente a 180 focos de fuego en 58 municipios (más de la mitad de los que hay) «la totalidad de ellos provocados». Los alcaldes de los lugares afectados no han dejado de manifestar en las últimas horas su impotencia por la situación.

El presidente de España, Pedro Sánchez, se mostró sensible con el trago que estaba pasando ayer la región a través de las redes sociales: «Siguiendo atentamente la evolución de los numerosos incendios que permanecen activos en Cantabria. Mi reconocimiento y apoyo a los profesionales de los servicios de emergencia y a todos los voluntarios que están trabajando en la extinción de estos incendios», tuiteó.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios