El hotel rural de un pueblo de Burgos que denuncia el mal estado de su acceso

«Menudo camino de cabras que tienes aquí», afirmaba un taxista que venía a recoger a unos huéspedes del hotel rural Molino de la Vega. Este alojamiento, que pertenece al término municipal de Arcos de la Llana, denuncia que el acceso al mismo resulta especialmente complicado por el estado de la vía de entrada.

Se trata de un camino que no está asfaltado en su totalidad, solo unos metros en el inicio. Uno de los principales motivos por el cual exponen este problema es que ante las lluvias, como la que vivieron el pasado viernes 4 de julio, este acceso «se convierte en un río», tal y como denuncia Iciar Carrero, propietaria del hotel. A pesar de presentar zanjas a los lados y un sistema de recogida de agua en el inicio, estas medidas no son suficientes para combatir las acumulaciones que se generan en caso de fuertes precipitaciones.

Con el paso de los aguaceros, además, el terreno se deteriora rápidamente, lo cual supone un problema para los huéspedes y para poder cumplir con las necesidades y requisitos de cara a mantener el hotel. «Hay motos que no pueden pasar. El camión del gasóleo o alguien que viene con remolques también pasa por grandes dificultades», explicaba indignada Carrero.

La mayoría de los visitantes que reciben son extranjeros. Esta semana se encuentran a plena capacidad, coincidiendo con la Dance World Cup que se está celebrando en Burgos. Para la propietaria, especialmente ahora que están inmersos en plena temporada alta, acondicionar el acceso resulta primordial. «Si pudiéramos, lo habríamos hecho nosotros mismos, igual que trabajamos un poco en la zona de la entrada», afirmaba, pero admitía que, al tratarse de un tramo de propiedad pública, no pueden hacerlo.

Esta lucha por conseguir un buen acceso a las instalaciones lleva abierta más de una década, según la propietaria. «Hemos enviado muchos escritos al Ayuntamiento para que hicieran algo, pero alguna vez ni siquiera recibíamos respuesta», afirmaba. Ahora se están preparando por si fuera oportuno dar el paso a la vía judicial frente al Ayuntamiento de la localidad.

Por su parte, el alcalde de la localidad, Javier Castillo Alonso, ha subrayado que este acceso viene registrado como «Camino Molino de la Vega». Al tratarse de un camino y no de una calle, defiende que el Ayuntamiento no tiene potestad para asfaltar un camino, ya que podría suponer represalias por parte de la administración de Medio Ambiente.

Defiende que la institución contestó al hotel y que están trabajando en arreglar el camino, lo cual sí tienen permitido hacer y, tal y como ha afirmado el alcalde, «se va a hacer». «Estuvimos el concejal de Izquierda Unida y yo junto con la empresa encargada en el lugar y decidimos el plan de actuación», afirmó Castillo.

El alcalde defendió la actuación del organismo local, añadiendo que el Ayuntamiento está por la labor de arreglar este acceso y que ya han comenzado las gestiones. Sin embargo, confiesa que no tienen marcada una fecha de inicio para que comiencen las tareas en la zona, ya que depende de la empresa contratada.

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