Condenan a 3 años y 7 meses de prisión a un policía local de Miranda por revelación de secretos

La Audiencia Provincial de Burgos ha condenado a tres años y siete meses de prisión a J.A.F.U., agente de la Policía Local de Miranda de Ebro acusado de un delito de descubrimiento y desvelación de secretos cometido en el ejercicio de su actividad como funcionario público. Según informa EL CORREO, la Audiencia también dictamina la «inhabilitación absoluta para el desempeño de cualquier cargo e empleo público» por un periodo de 6 años, que incluye, además, la «pérdida definitiva» de su condición de agente del Ayuntamiento mirandés.

A mayores, la sentencia dictada por tres magistrados de la Audiencia Provincial recoge que J.A.F.U deberá indemnizar con 15.000 euros a los herederos del que fuera concejal de Seguridad Ciudadana, Joaquín Muñoz, fallecido en julio de 2017, y con 6.000 euros a su hermano. Cantidades que se estiman en concepto de «daños morales».

Según relata el tribunal en la sentencia, durante la vista oral, celebrada entre enero y febrero, ha quedado demostrado que el agente, que mantenía una «enemistad» con el entonces concejal, aprovechó su condición para intentar dañar la imagen de este. Para ello, y valiéndose de los recursos policiales disponibles, averiguó en mayo de 2012 que un familiar de Muñoz tenía antecedentes penales.

Ya en junio de ese mismo año, el concejal abrió al acusado un expediente disciplinario, y, apenas dos días después, el tribunal considera probado que el agente introdujo por debajo de la puerta del despacho del edil dos impresiones originales sobre los antecedentes del familiar. En la impresión correspondiente a las fotografías, el acusado había añadido «con letra de imprenta la frase 'Agresor sexual. ¡Ojo!'». Al día siguiente, otro agente encontró entre los partes de trabajo copias de los mismos documentos introducidos por debajo de la puerta del concejal.

En octubre de 2014, el acusado presentó en el registro del Ayuntamiento un escrito dirigido a a la responsable de la Mujer del Grupo Socialista, en el que se transcribía parte de los hechos de una sentencia dictada por al Audiencia de Zaragoza en la que se condenaba al hermano del edil. Documento que, se explica, recogía el requerimiento de «interesando saber cuál es la postura» en referencia a ese asunto.

En noviembre de ese año el acusado presentó de nuevo en el registro municipal un escrito dirigido a la misma responsable municipal en el que hacía mención al documento anteriormente presentado, informando entonces del vínculo de esa persona con uno de los concejales. Documento que también trasladó a PP e IU y que, según apuntó, también iba a poner en conocimiento de los medios de comunicación.

Por todo ello, el tribunal considera a J.A.F.U. autor de un delito de descubrimiento y desvelación de secretos. Sin embargo, la Audiencia ha decidido absolverle del delito de falsedad en documento público que también se le imputaba. En este caso, el tribunal no considera probado que fuera él quien modificó en el registro Eurocop los datos del hijo del concejal, al que pasaron a adjudicar la condición de «delincuente».

Por su parte, la sentencia, ante la que cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo, absuelve a otros cuatro agentes de la Policía Local, compañeros del condenado, que también se sentaron en el banquillo de los acusados.