La falta de agua obliga a restringir el riego de zonas verdes en Miranda
El Ayuntamiento de Miranda decide reducir al mínimo el riego de las zonas verdes de la ciudad ante la escasez de agua de las captaciones
La ausencia de lluvias registrada durante las últimas semanas ha motivado un desplome de las reservas de agua de las que se abastece Miranda de Ebro, lo que ha obligado al Ayuntamiento a tomar medidas directas y restringir el riego de las zonas verdes de la ciudad.
Según informan fuentes municipales, las captaciones de La Calera y Valverde, claves en el suministro de agua de la ciudad, han visto sensiblemente reducidos sus niveles en los últimos días, en los que el calor, además, ha disparado el consumo de agua doméstico.
A mayores, se ha confirmado que el depósito de distribución de Bayas, cuya capacidad es de 4 metros de nivel, se encuentra a 1,20 metros, siendo incapaz de recuperar el nivel pesar a estar funcionando el pozo de bombeo de La Calera a pleno rendimiento, según un informe técnico emitido al respecto este mismo viernes.
Dicho pozo de bombeo ha visto reducido el nivel freático del manantial, situándose esta semana a 7,1 metros, cuando en periodos de escasez de precipitaciones (principalmente verano) la media siempre se ha encontrado por encima de 8 metros.
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Esta situación ha obligado al Ayuntamiento a actuar para evitar males mayores. Así, y tras aplicar «algunas medidas restrictivas durante las últimas semanas» y ver que «el problema persiste», se ha decidido «reducir el riego a lo mínimo imprescindible para mantener con vida las zonas verdes».
A partir de ahí, tal y como reconocen los concejales de Medio Ambiente y Servicios, María Cueva y Guillermo Ubieto, y si no se consigue revertir la situación en los próximos días, «se tendrán que tomar medidas más drásticas para asegurar el agua corriente en los domicilios».
