Los trabajadores del San Juan de Dios, «contentos» pero con «incertidumbre»
El comité de empresa solo sabe que se negociará con la Junta el convenio para 2022, pero celebran que el ERE se haya paralizado, lo mismo que el cierre del hospital burgalés
Los trabajadores del Hospital San Juan de Dios de Burgos solo saben que, de momento, el centro hospitalario no se cierra y que ya no se van a la calle. La dirección les ha comunicado que están negociando con la Junta de Castilla y León las condiciones del convenio en 2022 y, aunque reconocen que están «contentos», también siguen con la misma «incertidumbre» ante el futuro del hospital.
«Al menos no lo cierran», apunta Pilar López-Gómez, presidenta del comité de empresa. Esta mañana, la dirección se ha reunido con ellos y les han comunicado que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que se iba a presentar esta tarde, se paraliza. Y que, en principio, se garantiza trabajo durante un año, porque se aplicará el segundo año de la prórroga, hasta el 31 de diciembre de 2022.
Aun así, López-Gómez reconoce que no saben más, porque la dirección ha insistido en que están negociando con la Junta, quien ha aceptado revisar la aportación económica anual y sentarse a hablar de la carpeta de servicios y sus sostenibilidad. Y las negociaciones se dejan para después de las Navidades, así que, en parte, se ha dejado a los trabajadores «en ascuas».
«No se sabe con qué actividad van a seguir. No sabemos absolutamente nada, solo que se sigue», insisten desde el Comité de Empresa, y se recuerda que es el segundo año que viven esta situación. En 2020, el San Juan de Dios anunció que cerraba si no se renegociaba el convenio, que es deficitario, y la Junta salvó la situación aprobando la prórroga de dos años para cubrir una negociación de tres meses.
Pero llegó al primavera y Sacyl decidió rescindir el convenio, apostando por atender a los pacientes derivados en el HUBU y en el Divino Valles. Y esa era la intención hasta que la semana pasada, Alfonso Fernández Mañueco expulsó a Cs del gobierno regional y convocó elecciones para febrero. Ahora, la garantía de trabajo es solo un año más, así que es lógico que los trabajadores sigan inquietos.