«Vemos situaciones muy duras pero quienes más sufren con la crisis del coronavirus son ancianos y niños»

Protección Civil se ha revelado como una organización imprescindible para llegar a cubrir todos los frentes en plena crisis del coronavirus. A sus labores de apoyo a la policía, se han sumado estos días el reparto de alimentos en el medio rural, la distribución de medicinas de hospital para enfermos crónicos y los pedidos a las farmacias. Pero no solo eso, también acuden a la llamada de auxilio de aquellas personas que tienen dificultades para valerse por sí mismas y colaboran con la red de vountarios que está realizando máscaras con impresoras 3D. En difinitiva, «estamos para ir donde nos necesiten», explica José Luis García, presidente de la agrupación en Aranda de Duero.

Los voluntarios de Protección Civilc onstituyen un apoyo en la provincia para abordar la emergencia sanitaria. «Estamos siempre activados, en la Ribera del Duero en dos turnos diarios con tres voluntario por turno», explica García. Eso sí, siempre preservando la salud de los miembros de la agrupación, «eso es prioritario, tenemos material de protección, en la base siempre se respeta la distancia de seguridad y muchos están de retén y entrarían en caso de necesidad», afirma el presidente. De hecho, confiesa, de los 27 voluntarios que hay en Aranda de Duero, uno se encuentra enfermo por coronavirus y dos aislados por precaución.

La situación «ha desbordado a todos» según García pero asegura que «han sido capaces de dar el Do de pecho» y de adaptarse. «Se ven cosas muy duras, nos llamó una chica desde Madrid porque estaba muy preocupada por sus padres que eran mayores, así que fuimos a su casa, les ayudamos e hicimos una videollamada con la hija para que se vieran. A los pocos días nos enteramos de que la anciana había fallecido por coronavirus«, relata.

«Esto está siendo muy duro para todos pero quienes más lo sufren son los ancianos y los niños», reconoce García. Por este motivo, surgió la idea en Protección Civil de acudir a felicitar a los más pequeños con los vehículos de la agrupación hasta sus portales. Iniciativa que tuvo tanto éxito que han tenido que acotar las edades de los pequeños al verse desbordados de peticiones.

De cara a las próximas semanas continuarán, como siempre, «al pie del cañón». «Colaboramos con la logística del hospital de campaña de Aranda y estamos apoyando el proyecto de unos voluntarios maravillosos que hacen máscaras con impresoras 3D«. Es la agrupación la encargada de llevar el material a las casas de estos 'makers' y de distribuir las máscaras terminadas en sus lugares de destino.

De la tragedia, García se queda con la respuesta de la gente: «Cada iniciativa que ponemos en marcha solicitando cualquier tipo de colaboración, se desborda». Y concluye, «la solidaridad que está demostrando todo el pueblo es increíble».