La nueva pastelería con toques argentinos que ha abierto sus puertas en Burgos

Una nueva pastelería ha abierto sus puertas en Burgos, concretamente en el barrio de Villímar. Se trata de un establecimiento que elabora productos artesanos, muchos de ellos con toques traídos desde Argentina.

El nuevo negocio se sitúa en la calle José María Francés Gil, número 7, en una de las vías más comerciales del barrio burgalés. La apertura de este local se produjo recientemente y ya se ha convertido en uno de los establecimientos más concurridos de la zona, su nombre es AlbiCeleste y se ha convertido «en un sueño hecho realidad» para sus propietarias.

La gerentes de esta pastelería son madre e hija. Esta última ha trabajado desde siempre en pastelerías y cafeterías y en un impás de su vida decidió abrir una propia, «quería poner algo mío y que mejor que con mi madre que es repostera», reconoce.

Gracias al propio obrador que tienen en el mismo lugar abastecen al barrio burgalés con productos comunes de España y «cositas de nuestra tierra». Su procedencia, Argentina, les ha llevado a elaborar alfajores, el clásico de maicena, coco y dulce de leche o de otros sabores como lotus y oreo. Sin olvidar las pastafrolas, las tartaletas de membrillo, guayaba, batata o dulce de leche.

En su «espacio de creación» cocinan y prueban día tras día nuevas combinaciones para sus dulces más famosos. Muchas de esas elaboraciones se han convertido en las preferidas de los vecinos de este barrio de Burgos, «la acogida está siendo super buena, estamos todos muy felices», aseguran.

Pero, aparte de los dulces citados, también ofrecen algo bastante novedoso. Tartas de cumpleños pequeñas o como ellas llaman «mini tartas». En la mayoría de pastelerías se suelen trabajar con tartas de más de diez porciones, por eso estas argentinas han querido hacer algo más particular y en lo que puedan destacar.

AlbiCeleste representa el color de su bandera, la de Argentina, pero no solo eso, la afición por el fútbol de las propietarias también fue uno de los detonantes para poner este nombre al sueño de sus vidas.

A la selección argentina también se la conoce como albiceleste por su color blanco y azul cielo. Las dueñas del establecimiento creyeron que era el nombre «idóneo para representarnos» además de poder usar y jugar con los colores de la bandera que les parecen «tan suaves y delicados».

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