Un médico de Burgos salva a un corredor en plena carrera Behobia-San Sebastián
El participante tuvo que ser reanimado tras sufrir una parada cardiorrespiratoria pero «no tiene mal pronóstico», según la organización de la prueba
Álvaro Vicente
Martes, 11 de noviembre 2025, 14:34
Un médico de la UCI de Burgos asistió a un corredor en plena carrera Behobia-San Sebastián celebrada el domingo, 9 de noviembre, en la capital donostiarra. El deportista sufrió una parada cardiorrespiratoria en la zona de Lintzirin y, después de reanimarle en plena prueba, fue trasladado al hospital.
El atleta popular fue trasladado al hospital y, según apuntan desde la organización, «no tiene mal pronóstico», según señala El Diario Vasco. Las próximas horas determinarán su evolución. Cientos de corredores fueron testigos del trabajo de los sanitarios para salvar la vida a este varón, que se desmayó sobre el kilómetro diez de la carrera para posteriormente entrar en parada cardiorrespiratoria.
En un principio fueron los propios corredores los que le atendieron. Una enfermera de anestesia, un médico de la UCI de Burgos y otro médico de UCI que participaban en la prueba iniciaron la reanimación básica, sin material, de este paciente, hasta que llegaron los sanitarios de la DYA, que lograron estabilizarlo antes de que fuera trasladado en una ambulancia medicalizada de Osakidetza a un centro hospitalario.
Era la primera vez que el atleta popular corría la Behobia –se había probado en otras carreras pedestres en las últimas semanas como la 15K de San Sebastián– y por tanto su dorsal era blanco, con salida no antes de las 10.46 horas y como tarde a las 11.35 horas, momento en el que debió ponerse en marcha el último grupo. El objetivo de este donostiarra pasaba por completar la Behobia en un tiempo aproximado de dos horas, así que cuando tuvo el incidente rondaría los 50 minutos de esfuerzo.
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Es el caso más grave de los cinco traslados que se realizaron durante la prueba deportiva, los otros cuatro por golpes de calor. Y es que a pesar de que la temperatura no era mala para correr, 11 ºC cuando se dio el pistoletazo de salida con los corredores de élite, esta fue aumentando en el transcurso de la mañana hasta los 18 ºC que marcaban los termómetros a mediodía. Es en esas horas, entre las 12 y las 14 horas, cuando llegaron a meta los corredores que, a priori, más tiempo pasan sobre el asfalto y, por tanto, más expuestos están a sufrir los efectos del calor.
Es lo que ocurrió: la sensación a primera hora era buena para la práctica del deporte, pero el sol que asomó a media mañana subió la temperatura y ya no eran condiciones óptimas para correr una media maratón dura como es la Behobia. Como siempre, al margen de estos casos, otros corredores fueron atendidos por dolores musculares, torceduras o mareos, pero ningún caso derivó en situaciones peligrosas para la salud de los atletas populares.
Afortunadamente estos casos constituyen casos excepciones entre tanto participantes, ya que la mayoría de los inscritos prepara a conciencia la carrera, lo que minimiza el riesgo de que haya problemas de salud, y cruza la línea de meta con una sonrisa y sin la necesidad de recibir asistencia médica pese a la dureza de la prueba.